El proceso de evacuación paulatino de familias en el poblado de San Luis, afectado por la erosión lateral del río Quijos, que tiene su origen en un fenómeno de erosión del río Coca en toda la zona de El Reventador, sigue avanzando. En estos dos últimos meses las familias Carranza y Puruncajas han debido abandonar el sitio y esta misma semana lo hará una más.

Es que el fenómeno de erosión lateral y regresiva del río, que también amenaza y ha generado problemas en la infraestructura estratégica del país (oleoductos y obra de captación de Coca Codo Sinclair), en estos días se ha acercado más al poblado.

De acuerdo con Juan Carlos Barragán, coordinador de la zona 2 del Servicio de Gestión de Riesgos, la semana pasada las autoridades visitaron el sector y confirmaron que desde hace varios días existe un recrudecimiento del clima y de los problemas del terreno que es deleznable, el cual se ve afectado por lluvia, viento y el peso de la altura de la pendiente ha hecho que se pierdan dos hectáreas de terreno entre junio y julio.

Publicidad

La semana pasada estuvieron en el sector representantes de la Secretaría de Riesgos, de la Gobernación, del Ministerio de Transporte, el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi) y demás instituciones para vigilar cómo avanza la erosión lateral.

Barragán explicó que Gestión de Riesgos está en constante monitoreo con ayuda de otras instituciones. Por ejemplo, Petroecuador provee información a través de drones que vigilan desde el espacio aéreo el movimiento de los terrenos. El sitio se vigila también a través de monitoreos con vuelos de dron, se han colocado testigos (unas señales) que permiten medir cómo avanza la erosión metro a metro.

El Servicio de Gestión de Riesgos ha puesto la distancia de 50 metros de la erosión como un límite definitivo para que las familias que habitan en el sector deban salir del sitio. Barragán informó que la familia Carranza, que salió hace dos meses, se encontraba ya a 49 m. Mientras que la familia Puruncajas ha salido la semana pasada, pues ya existía una distancia de 70 metros entre su casa y la erosión. Este viernes se dará el traslado de la tercera familia.

Publicidad

Al momento ya son catorce familias las evacuadas y quienes han estado más cercanas al umbral de los 50 metros que se ha determinado como una alerta máxima para proceder con la salida del territorio, explicó. Barragán no puede decir con precisión cuántas familias faltarían por abandonar el sitio. Esto es debido a que en los últimos meses también ha habido un ingreso de nuevas familias a San Luis que han llegado con la esperanza de conseguir un trabajo, pues la presencia de las autoridades gubernamentales y de técnicos que monitorean los eventos, así como los procesos de construcción de variantes de los oleoductos, ha incrementado la actividad económica.

Barragán también informó que Riesgos ha levantado expedientes de los propietarios de terrenos en San Luis y de quienes arriendan. Para estos pobladores existen al menos dos opciones. Los primeros, que son propietarios, pueden participar en un proceso de permuta con otros terrenos que se ofrecen por parte del Municipio de El Chaco. El Miduvi construye las casas.

Publicidad

En cambio, para los arrendatarios, la figura que se usa es la venta de terrenos y con precios económicos.

Se dan casos también de pobladores que tienen propiedades fuera de San Luis y que se reubican en esos otros sitios.

Entre tanto, comentó que a las familias que salen se les está otorgando un bono por desastre y catástrofe, según el Decreto 316. Así se levanta la información a través del Servicio de Gestión de Riesgos con base en la evaluación inicial del Municipio. El MIES activa un bono que se ha entregado a once personas al momento y asciende a $ 263,47 por una sola vez.

Como punto adicional, Barragán aseguró que se ha establecido señalética en San Luis para las rutas de evacuación. Y con la población se están trabajado planes familiares de emergencia. Todo ello porque si bien el fenómeno avanza de manera paulatina, también podría generarse un caso fortuito o extremo. Y en ese caso existe un plan con el GAD de El Chaco al que se le ha provisto de colchones, sillas, camas, cocinas, entre otros, para atender la emergencia si se llegara a dar.

Publicidad

Entre tanto, este fenómeno se ha mantenido sin mayores novedades con respecto a la obra de captación de Coca Codo Sinclair. Al 18 de julio, Celec informó que la erosión del río Coca sigue a 7,9 kilómetros de las obras de captación. También indicó que se han presentado caudales altos en horas de la tarde, con un máximo de 497 m3/s en el frente de erosión. El caudal del día permite apreciar que no hay cambios en el frente de erosión.

Petroecuador informó que frente al fenómeno, la empresa decidió construir una variante hacia al lado de la montaña y por ahora el sector está estable. (I)