Se las ve por igual en entrevistas en los medios de comunicación, conversatorios en universidades y gremios, y hasta en videos de TikTok que se postean en redes sociales. Se trata de las asesoras jurídicas de la Presidencia de la República, Karen Sichel y Amalia Fernández-Salvador, y de la viceministra de Gobernabilidad, Ana Changuín. Las tres, jóvenes y mujeres, han tomado la batuta de las vocerías de la campaña de promoción de la consulta popular del régimen.

El próximo 5 de febrero, a la par de las elecciones seccionales y del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), la ciudadanía también deberá pronunciarse respecto a ocho preguntas de enmienda constitucional planteadas por el presidente Guillermo Lasso.

Estas se basan en tres ejes: seguridad, institucionalidad y democracia, y ambiente. La 1 se refiere a la extradición de ecuatorianos; la 2, a la creación de un consejo fiscal; la 3, a la reducción del número de legisladores; la 4, a cambios en los requisitos para formar partidos y movimientos políticos; la 5, a traspasar a la Asamblea Nacional la atribución de selección de autoridades de control que ahora tiene el CPCSS; la 6, a cambios en la forma de elegir a los consejeros ciudadanos; la 7, a incorporar un subsistema de protección hídrica al Sistema Nacional de Áreas Protegidas; y la 8, a dar compensaciones a pueblos y comunidades por su apoyo a la generación de servicios ambientales.

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El Instituto Geográfico Militar avanza en la impresión de las papeletas para el referéndum 2023. Foto Cortesía CNE

Sichel, de 29 años, cuenta que fue contratada expresamente para la elaboración de las preguntas de la consulta popular. Labora en la Presidencia de la República desde hace un año y tres meses. Es experta en derecho constitucional y organismos anticorrupción, y antes fue consultora externa del Comité por la Institucionalidad Democrática, que impulsó —asimismo— una propuesta ciudadana de enmienda constitucional para eliminar el CPCCS, crear un Parlamento con dos cámaras y la autonomía de la Fiscalía.

Y justamente por el conocimiento que tiene del tema, luego de una exposición ante el presidente Lasso en el Palacio de Carondelet, este le dijo: “Usted tiene que ser vocera”, según relata ella.

Entonces —agrega— la labor de la vocería es “tratar de transmitir esos asuntos que pueden ser bastante técnicos de la manera más sencilla para que se entiendan cuáles son los efectos de la consulta”.

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“Lo que hacemos es ir principalmente a los medios de comunicación, a las universidades —donde están los jóvenes— y a los gremios para contarles un poco cómo se realizaron los procesos de fundamentación, de recopilación de evidencia, de jurisprudencia, data, por qué se incluyeron unas preguntas y no otras...”, dice Sichel, que aclara que no se está pidiendo el voto por el sí, sino que se llama a ejercer un voto “responsable”. Pero es obvio que el Gobierno quiere que su consulta gane.

“La fortaleza de nuestra vocería es que es muy técnica, y eso a la gente le gusta mucho, porque, en vez de tratar de convencerlos políticamente, lo que hacemos es llamar a la reflexión. Sí, esta consulta no es suficiente, no es una varita mágica, pero es importante para el país”, indica la funcionaria.

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Fernández Salvador, de 26 años, fue la “mano derecha” de Sichel en la elaboración del documento de la consulta. También es experta en derecho constitucional. Ella se encargó de la investigación y recopilación de la información de sustento de la consulta, y de supervisar la redacción de los textos. Ella labora en la Presidencia de la República hace menos de un año.

“Mi trabajo consistía en lograr que la propuesta pase los límites de la Corte Constitucional; todas las preguntas debían ser enmiendas (...), pensar en el análisis que haría la Corte y hacer los ajustes para que cumplan los parámetros constitucionales”.

La joven comenta que las vocerías que llevan adelante les permiten tener contacto directo con las personas; algo que le agrada más que moverse en las redes sociales, ya que hablar sobre temas técnicos en ellas es complejo: no se pueden resumir todas las ideas en 140 palabras o 30 segundos.

El Consejo Nacional Electoral (CNE), despacha desde el 20 de enero los paquetes electorales para las elecciones seccionales, CPCCS y Referéndum 2023. Foto: Carlos Granja Medranda

En función de análisis periódicos sobre el nivel de conocimiento de las preguntas, Sichel y Fernández Salvador se han dividido las tareas: la primera se enfoca en las visitas a las provincias más grandes; y la segunda, junto con otros integrantes del equipo, van a otros espacios más pequeños y comunitarios, pero entre todos se refuerzan.

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La labor de estas funcionarias se articula con las acciones que se desarrollan desde el Ministerio de Gobierno. Como viceministra de Gobernabilidad, Changuín, de 36 años, visita las provincias todas las semanas. Bajo su conducción hay cuatro subsecretarías: Gobernabilidad, Coordinación Intragubernamental, Coordinación con Otras Funciones del Estado, y con los Gobiernos Autónomos Descentralizados.

Usualmente, tiene reuniones con gobernadores y tenientes políticos para revisar sus funciones, y dialogar con sectores políticos y sociales en aras de la gobernabilidad del país; pero en las últimas semanas ha abierto espacios en los territorios para hablar sobre la consulta popular, “porque es un paquete de herramientas que va a apoyar la gobernabilidad del país para este y todos los Gobiernos que vengan”.

“Yo no diría que estoy en campaña. Mi obligación como funcionaria es dar la mayor cantidad de información en todos los foros donde sea posible. Combino la agenda de gobernabilidad con la consulta”, explica Changuín, quien señala que lo que se busca es que la gente se informe, “que no permitan que les digan que voten sí o no por afectos o desafectos”.

Que las tres funcionarias estén “frenteando” la campaña informativa del régimen no es algo que se planificó, aclara ella. “Pero por supuesto que responde a que este es un Gobierno que confía en las mujeres, que las integra en puestos de decisión; en mi caso, desde el Viceministerio de Gobernabilidad dirijo instancias importantes y me siento orgullosa de aquello. Además, siempre que hay mujeres en un proyecto, todo fluye, todo sale mejor”, recalca. (I)