Cuenca

Un adulto mayor, de 82 años de edad, que constaba como desaparecido desde hace varios días apareció carbonizado en el sector de Balzay Alto, en la parroquia rural San Joaquín, en el noreste de la ciudad de Cuenca. La familia quedó consternada con el hallazgo, aunque no comprenden las razones de la extraña muerte.

Zoila Montero, vecina del sector, contó que mientras mudaba a su ganado (los llevaba a un lugar para que pasten), su perro alertó de la presencia de un objeto extraño dentro de una gran pampa.

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Alarmada por lo observado, la mujer llamó a una vecina para que le acompañe a ver si se trataba de un animal o un cadáver humano. Al confirmar que se trataba de un cuerpo carbonizado, llamaron a la Policía.

Al poco tiempo, unidades de la Policía acudieron para levantar los restos del adulto mayor.

El cuerpo quemado fue llevado al Centro Forense de Cuenca para practicarle la necropsia de ley. Mientras esto ocurría, algunos familiares llegaron para conocer lo sucedido con el hombre identificado como Luis Serafín Orellana Cruz.

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Gladys Orellana, hija del fallecido, contó que cerca del mediodía le comunicaron de un cadáver y luego sus sobrinas fueron al sitio para confirmar si se trataba de su familiar reportado como desaparecido desde el 28 de mayo pasado.

Relató que apenas su padre desapareció en el barrio Barrial Blanco, ubicado en el norte de la ciudad, su hermano mayor inició los trámites para localizarlo, por lo que acudió a las autoridades respectivas para poner la denuncia del caso.

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Con un tono de voz calmado pidió que no se investigue más porque consideró que lo más importante era encontrarlo y ahora está junto a su madre. (I)