Se necesitan patrullajes de policías en las ciudades. Por otra parte, las familias tienen que fomentar a los descendientes fidelidad, justicia, humildad, verdad, rectitud, respeto... Son importantes los valores cristianos, morales para criar hombres de bien. El Estado con un Ministerio de Bienestar Social tiene que trabajar con personas capacitadas para educar a las familias de los barrios sobre los deberes, derechos, principios, como un pueblo culto. Los niños son un tesoro. Solo formamos a los hijos en las temáticas de modelaje, tecnología, deportes, idiomas, emprendimiento, artes, ciencias, cultura general...; tienen que ser primero los valores. A los niños tenemos que cuidarlos. Legalicen los 80 años de prisión para delincuentes que roban, venden, compran, ultrajan, asesinan...., a los menores.(O) 

Adolfo Martín Espinoza,

Guayaquil

 

Ecuador tiene que hacer más operativos. Dar cadena perpetua a todo aquel con cualquier edad, sexo, condición..., culpable de violación, agresión, acoso, abuso, maltrato, discrimen, robo, heridas, muerte, asalto, engaño, cometa cosas malas al infante. Violadores han embarazado a chiquillas, dado que los depravados tienen más de 40 años, lloran puesto que son enfermos, que son viejos; tienen dinero y palancas, no están presos sino en la casa. Deben cambiar las leyes.(O)

Azucena Rosaura Morales,

Guayaquil

 

La manera de prevenir el robo y venta de niños es estableciendo controles más efectivos para cuidar a los infantes en cualquier lugar en donde se encuentren. Desde luego que se debería enseñar desde cada hogar a todos quienes componen la familia, el respeto al ser humano y en especial para con los niños, sembrando amor, buenas costumbres y principios, para más tarde cosechar hombres de bien en todos los campos, llámense moral y ético, social y cívico, religioso. Tiene que sentarse un precedente que esté ligado a una regeneración de los sentimientos de quienes realizan estas malas acciones, para que tomen conciencia y rectifiquen su proceder. Esta ardua labor tendrá que ser implementada en los centros de rehabilitación social de todo el país, deben de ser controlados o dirigidos por autoridades o jueces que verdaderamente apliquen las penas y se preocupen por la regeneración de la conciencia de los internos mediante el desarrollo de programas para estos fines.(O)

José Ortoneda Sánchez,

Bahía de Caráquez