Dilectos amigos y lectores, probables inversionistas nos indagan muy a menudo sobre reales posibilidades de éxito de nuevos cultivos, lejos de los tradicionales que han identificado al Ecuador como gran nación agroexportadora, aflorando a nuestra memoria uno con grandes virtualidades como para conquistar espacios relevantes en el mercado mundial, se trata del aguacate, llamado también palta, por su origen quechua, en países del sur del continente, que cumple formalidades de ser creador de empleos, generador de divisas e inyector de liquidez para vivificar desfallecientes economías.

Varias de las provincias del país, tanto las que cuentan con valles abrigados en la serranía, como amplias zonas costeras, cumplen los requisitos para establecer un cultivo rentable, con el cuidado de escoger suelos apropiados, sin graves niveles de contaminación y buena fertilidad, magnitudes a determinarse luego de una correcta y profesional evaluación de suelos, como paso previo para decidir una segura inversión. El esquema legal nacional favorece en gran medida seleccionar al aguacate, dada la vigencia de normas claras en materia fitosanitaria, de supervisión y control, certificación de buenas prácticas agrícolas, no se diga los innúmeros estudios de factibilidad, con análisis de demanda a largo plazo, que no dejan lugar a dudas para inclinar preferencias por ese plantío.

Recobra vigencia lo expresado en un artículo anterior, que cuanto más investigaciones se realicen en el campo médico, mayores bondades devela su consumo, ahora no solamente por sus innegables cualidades nutritivas, dada su riqueza en vitaminas y minerales, sino que su contenido de lípidos benignos contribuye a superar dificultades cardiovasculares, al reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en el 22 y 20%, según estudios publicados por la Biblioteca Nacional de Salud de los Estados Unidos. Adicionalmente, las perspectivas de su industrialización son ilimitadas.

Un estudio realizado por la Universidad de Illinois ha robustecido el impacto positivo de su alto contenido de fibras dietéticas y grasas benignas, a lo cual se agrega el hallazgo que la pulpa de los aguacates actúa para bien de los microbios intestinales y sus metabolitos, al reducir los ácidos biliares y aumentar los benéficos ácidos grasos de cadena corta, demostrándose que los lípidos y la fibra de la palta estimulan el desarrollo de la microbiota o microorganismos alojados en los intestinos, de enorme importancia.

Para fortalecer la posición de este prometedor sembrío, mediante Resolución n°. MAGAP-SPF-2013-0146-R de 22 de octubre de 2013, se incluyó a la variedad hass, de nombre científico Persea americana, dentro de la nómina de especies forestales sujetas a estímulos económicos por su adecuada y orientada siembra, en los términos definidos por la cartera de Agricultura, lo cual es un valioso atractivo para empresarios interesados en su desarrollo con fines de exportación, que empieza a capitalizar adherentes, recordando que los planes gubernamentales hechos públicos hace tres años fue alcanzar la satisfactoria meta de 2.000 hectáreas nuevas con este magnífico plantío. (O)