En la política se ha creado un ‘virus’ de corrupción y portadores de ese ‘virus’ son políticos. Una ‘pandemia’ que no se ha podido erradicar y millones son los perjudicados sin respetar la condición que tengan. Se pensará que para este tipo de ‘virus’ no hay solución, en realidad por mucho tiempo no ha existido un antídoto para esta ‘pandemia’.

El peligro es que no te das cuenta que has sido contaminado porque a pesar de que son múltiples los síntomas, no los sientes. Es un ‘virus’ que está alojado en el cerebro, odio, poder y dinero, son sus ideologías que trabajan, manipulan, el cerebro de las personas contaminando su manera de pensar. Es un ‘virus’ poderoso, hace cuando tienes poder, corrompas las instituciones, persigas y deshonres a quienes están en tu contra. Hace que la justicia se ponga de rodillas a su servicio para poderse servir de sus enfermizos intereses. ¿Por qué? Ocurre porque nos hemos separado de nuestra verdadera esencia, de nuestro verdadero ser. ¿Cuál es el antídoto? Solo tienes que activar dentro de tu ser la compasión, la bondad, la paz, la claridad, porque el ser humano se ha contagiado de avaricia, poder y odio. (O)

Francisco de la Cruz Prado Ayon, Durán