¿No comprenden muchos políticos que antipatía, enemistad, rencor, aborrecimiento que se demuestran en discursos, los perjudica a ellos porque dejan ver qué sentimientos tienen, nada positivos para dar paz, progreso, unidad, a las ciudades, provincias, al país, que piensan ‘servir’?, así se ponen la soga al cuello.

Criticamos los actos malos de personas que protagonizan delitos con armas, pistolas, cuchillos bombas, contra el pueblo que no tiene seguridad por los asaltos, estruches, muertes, secuestros, etc. También con la lengua se puede matar, dividir a la población que necesita de candidatos una orientación, no necesita oir solamente frases de desprecios, para marcar el ‘chorro’ de papeletas en las votaciones. Pero algunas candidaturas le llevan, le halan del pelo a los votantes, debido a los insultos, a las mofas, a las vulgaridades vociferadas en sus campañas. (O)

Ximena Mendieta M., estudiante, Quito