Según juristas y políticos de valía, el pedido de juicio político al primer mandatario de la nación, don Guillermo Lasso Mendoza, no tiene pies ni cabeza y las causales de concusión y peculado no encajan apropiadamente; por tal motivo fue calificado como un mamotreto vergonzoso que raya en la ignorancia.

Nuestro pueblo consultado por el suceso, la mayoría dice que es un revanchismo de furia de ciertos asambleístas que quieren enjuiciar. Previamente tanto el Poder Ejecutivo como el Legislativo tenían que haber dialogado para llegar a un consenso, porque así lo exige una sociedad inteligente para evitar acciones extremas. ¡Dónde está el sentido común! Al país no le conviene la desestabilización, muerte cruzada, paros, aumentar el riesgo país. Con nuevas elecciones no quedan solucionados los problemas y la corrupción seguirá galopante. La última palabra la tiene la Corte Constitucional con juristas probos apegados al derecho, la justicia y la ley, que darán el fallo al siguiente pedido de asambleístas o solicitud de juicio político o de interpelación. Nuestro pueblo eligió a sus gobernantes, asambleístas, etc., para que solucionen los graves problemas del país, no los eligió para peleas viscerales. (O)

Johnny Robert Cedeño Miranda, licenciado en Periodismo, Guayaquil