El descuido, la ignorancia, la mala fe, el bandolerismo, la sinvergüencería, la indolencia; por decir lo menos, han invadido el país. Un país descuajeringado donde no se cumplen leyes ni hay quién las haga cumplir, no hace justicia, administradores y administrados no se respetan, reinan crímenes, robos...

El presidente después de subir al poder, tratando de enfrentar la mayor de las lacras que en ese momento nos consumía, la pandemia de COVID-19, pidió al pueblo que lo acompañe para la vacunación que cumplió con la ayuda de Dios y del Ecuador, y estamos entrando en la fase no final, pero sí deseada de llegar a la inmunidad a nivel de rebaño. Llegaremos presidente, siga firme con el proyecto de ley para mejorar la economía y crear más empleo, los únicos que se van a oponer son los que quieren seguir gozando del descuajeringamiento del país para llenarse sus bolsillos. (O)

José Carlos Maldonado Almeida, Guayaquil