El COVID no está suave, nos enteramos en el sector residencial, o de mensajes de chats de compañeros de trabajo, amigos, parientes, de la verdad: día a día mínimo tres conocidos están con la peste.

Las cifras de las autoridades no coinciden con las clínicas, los centros de salud, las viviendas. Ciertas autoridades aparentan que el virus en una semana cambió a manso, ‘no muerde’, el pueblo puede ir a los planteles, los trabajos, las reuniones con confianza. ¿Qué estudios, parámetros, análisis, estadísticas..., son de matemáticos, médicos, infectólogos, salubristas, de zoonosis, forenses, etc.; pueden de un día para otro mover el semáforo rojo a amarillo de la pandemia, asegurar que el virus ya ‘no muerde’? (O)

María Beatriz Vergara, Guayaquil