Leonidas Iza, el presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), es uno de los políticos más sectarios, dogmáticos y agresivos que actualmente viven en este país. Para comprobar esta certeza –aparte de observar sus acciones y declaraciones públicas reñidas con la ley– basta leer el libro Estallido: la rebelión de octubre en Ecuador (2020) que firman el mismo Iza, Andrés Tapia y Andrés Madrid, con el que pretenden demostrar el supuesto carácter insurreccional de los acontecimientos de octubre de 2019, que, según ellos, fue una rebelión histórica y hasta heroica de la lucha del pueblo.

El libro no tiene la intención de invitar a una seria comprensión sobre aquellos sucesos –actos vandálicos en los que se quiere que, por haber sido dizque populares, justifiquen toda agresividad y violencia contra bienes y personas–, pues no está hecho para debatir, sino para imponer; de ahí que no exhiba el más mínimo sentido de autocrítica, algo típico de los fanáticos de izquierda. Después de casi 300 páginas, los firmantes estampan la solución final: “Comunismo indoamericano o barbarie”. Esto es, toda su argumentación está sostenida en una ceguera histórica, de la cual irresponsablemente los firmantes no se hacen cargo.

Poco original, en el libro se señala que el socialismo/comunismo, con demolición del Estado burgués y abolición del capitalismo, es la única opción para los oprimidos del Ecuador. Para Iza, Tapia y Madrid el muro de Berlín no fue derribado por la gente; la historia no les ha demostrado que no existen países exitosos socialistas de corte marxista-leninista en el planeta. Que los que ha habido y hay –conducidos por individuos y grupos de poder malvados– castigan cruelmente a sus ciudadanos recortándoles el horizonte de la vida. Estallido está redactado como si la utopía socialista/comunista recién será erigida con Iza a la cabeza.

En esta concepción fantasiosa, ni Lenin ni Stalin asesinaron a millones de soviéticos, ni Mao tampoco asesinó a millones. Para Iza, Tapia y Madrid tampoco Pol Pot ni la dinastía familiar de gobernantes norcoreanos exterminaron a millones de ciudadanos. Para ellos no hay exiliados cubanos ni desplazados venezolanos. Sin una pizca de autocrítica ante las ideas que propugnan, creen que el socialismo/comunismo llevará a los oprimidos a una plena liberación. Impregnados de una jerga universitaria dogmática y sectaria, terminan aventurando con que el Ecuador necesita un comunismo indoamericano.

Estallido no es una invitación para discutir sobre la política ecuatoriana, sus actores diversos, sus fuerzas sociales, sus intereses económicos y productivos y sus proyectos de país. Estallido formula la siguiente amenaza a la sociedad ecuatoriana: si no se cambia estructuralmente la barbarie del capitalismo, la insurrección popular crecerá hasta destruir el Estado burgués y liquidar a la burguesía ecuatoriana; si los gobiernos y los sectores con poder persisten en un modelo de capitalismo liberal, Iza, Tapia y Madrid impondrán con agresividad y por la fuerza una grandiosa sociedad comunista, indoamericana y delirante. Justamente, otro tipo de barbarie. (O)