Mariela Viteri: ‘Todos han sido unos maestros’

Mariela Viteri se representa a sí misma en la obra teatral Las burladas por Don Juan, una producción del Teatro Sánchez Aguilar, actualmente en cartelera. Interpreta a una conductora de un programa de televisión, en el que cuatro mujeres víctimas del engaño de Don Juan, exponen sus casos. Fue invitada por los directivos del teatro a realizar un casting para que lo viera la española Lucía Miranda, quien dirige la pieza. “Luego me llamaron. Pero ahí me asusté”, relata esta comunicadora, de 44 años, quien está alejada, por ahora, de la televisión y se dedica a sus dos empresas: radio Fuego y revista Mariela.

¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar en teatro? ¿Es la primera vez que lo hace? 
Es mi primera obra de teatro, aparte de las que hacía cuando era chiquita y jugaba con las Barbies. Estoy muy agradecida de haber tenido esta oportunidad, a través del Teatro Sánchez Aguilar. Una cuando aprende no puede sentirse sino agradecida. Han sido grandes enseñanzas, desde el uso del jenjibre, que sirve para la garganta y siempre hay que tenerlo ahí, hasta lo que he aprendido de los actores. Y Lucía me enseñó a decir los textos en verso, que nunca en mi vida lo había hecho. Todos han sido unos maestros para mí.

¿Hay una diferencia entre la Mariela presentadora de televisión y la Mariela personaje de la obra?
Soy yo. Me marcan ciertas palabras en ciertos momentos, me dan preguntas que debo hacer, porque de lo contrario podría irme yo con un juicio de valor y eso es algo que no hemos tratado de hacer.

 ¿Es posible que las palabras que usó en una función, sean distintas en la siguiente?
 Es probable, pero hay cosas que no cambian. Hago de moderadora, pero internacionalmente mi papel se llama Joker, que es la persona que hace enrutar todo lo que está pasando y cómo se traslada lo que está sucediendo en las tablas, hacia el público y que este sienta y se manifieste. La idea es que se encamine hacia una reflexión sobre el tema del donjuanismo (y la violencia contra la mujer).

En la obra su personaje hace una pregunta: ¿a estas mujeres las burlaron o se dejaron burlar? ¿Qué opina usted?
Hay diferentes casos. Pero nadie tiene derecho a abusar. Las mujeres a veces no pensamos con la cabeza, sino con el corazón. Creo que debemos ser menos emocionales, porque en las emociones perdemos el examen.

¿Ha sufrido violencia por su condición de mujer?
 De alguna manera sí, porque todas las mujeres la hemos sufrido de alguna forma. Pasar por divorcios no es fácil. Y cuando tú pasas por divorcios estás viviendo la violencia de sentirte en un desamor, de sentirte tal vez en un rechazo, de sentir que todo ese cuento de hadas no era cierto. Son tipos de violencia que tenemos que tomar en cuenta. Cuando se vaya a escoger a alguien para casarse, que sea una persona que vaya a apoyarte en cualquier circunstancia.

¿Repetiría la experiencia en teatro?
Feliz la repetiría. Me ha encantado.

(Mariela viste de negro. Son las 12:00 del martes y acaba de ofrecer la primera función de Las burladas por Don Juan, junto a un elenco de actores y actrices ecuatorianos. Entre otros, Érika Vélez, Ángela Arboleda, Ricardo Velasteguí y Aníbal Páez. Estuvo dedicada a público estudiantil. El teatro lucía lleno de jóvenes de colegio. El estreno para público general sería el jueves. De manera que la función que acaba de dar es como su examen. Mientras los estudiantes se quedan sentados, dentro del teatro, escuchando a la directora Lucía Miranda y a Beatriz Manrique, en un foro sobre la obra y la violencia, la presentadora sale a los exteriores. Se sienta en una de las escaleras del teatro y allí se realiza la entrevista. Una joven que pasa por el lugar le solicita un autógrafo y una foto. “Encantada mi amor, espérame un ratito”, le dice).

¿Cómo se siente fuera de la televisión?
Me siento bien, pero siempre voy a tener mi corazoncito en la televisión. La televisión me dio tanto. Me dio el cariño del público. Que la gente me quiera y me recuerde debo agradecerlo. Cuando la gente me pide un abrazo, un beso o un autógrafo, yo soy feliz. Tanto, que una vez me asaltaron y yo creía que venían a pedirme un autógrafo. Qué ingenua (suelta una carcajada). Yo vibro con el cariño del público y lo mantengo a través de la radio y de la revista. Creo que con la revista y la radio estamos haciendo un gran trabajo de equipo. Lo que hacemos es comunicar.

¿Le gusta hacer periodismo escrito?
Me encanta. Además, estoy estudiando Comunicación Social en la UTPL Universidad Técnica Particular de Loja) y he aprendido mucho. Hago etrevistas, reportajes, el editorial. A veces hago las curiosidades.Yo soy una redactora más de revista Mariela. Hago entre cuatro y cinco temas para cada edición. Y luego reviso la revista completamente con la correctora de estilo al lado y la revista sale con mi ok.

¿Cree que su etapa de televisión ya terminó?
No podría decir eso. Eso solo Dios lo sabe. Ahora sé que estoy con bastante trabajo. Un programa diario no podría hacer, porque tengo muchas responsabilidades. Tengo responsabilidad de empresas y eso es algo que requiere mi presencia. Tengo un programa de radio diario y mis hijos. Voy a tener mi sitio web y ahí voy a colgar las entrevistas que hago. Voy a hacer televisión de otra manera: en mi sitio web. Será la página de Mariela, con la radio y la revista.

(Por la escalera pasan otros jóvenes y le solicitan una foto. Mariela contesta: “Con mucho gusto. Termino la entrevista y la hacemos”).

Su caso es particular: de presentadora de televisión se convirtió en empresaria de la comunicación. ¿Cómo lo hizo?
Te voy a contar una anécdota. A los dos meses de estar en la televisión yo tenía un problema de garganta y me salían gallos. Me dijeron: “Te vamos a cambiar por Carlita Sala, porque lo estás haciendo muy mal con esa garganta”. Y yo me quería morir. Estaba enamorada de la televisión. Me metí de lleno y me dije, esto es trabajando. Entonces decían: ¿quién quiere irse de viaje? Yo respondía: Yo. ¿Quién quiere editar? Yo. Yo estaba para todo. Fue una forma de ganarme mi espacio. Y luego comencé con las entrevistas y se dio el tema mío de la espontaneidad y de las preguntas indiscretas. Me iba con todo, y entonces dijeron: “ah, Mariela”, y me pusieron ojo. Pero antes, cuando me dijeron que me iban a cambiar, me dio miedo y entendí que en la televisión un día podía estar y al otro no. Yo siempre he querido hacer cosas. Si no he vendido ropa, he hecho dulces o he vendido bisutería. Yo siempre quería hacer un negocio.

¿Ese espíritu suyo, de emprendimiento, se lo inculca a sus hijos?
Ellos me ven como soy, pero también son como un poquito temerosos, porque saben que en medio de todo este mundo que he vivido, he tenido también bastantes dificultades. Y ellos me dicen: ay, mami, tú te has complicado mucho la vida, yo no me la quiero complicar. Pero en el fondo les gusta. Somos un lindo trío mis hijos y yo. (Es madre de dos hijos: Marielita y Ricky).

¿Qué edades tienen?
Marielita ya tiene 17 años. Y ya mismo cumple la mayoría de edad.

¿Está enamorada?
Por allí le ha de gustar alguien. Yo le digo: cualquier cosa, cualquier avance, me lo comunicas por favor (lo dice sonriente). Eso es importante. Ella tiene mucha confianza conmigo.

¿Esa Mariela que el público tiene en su imaginario, es la misma Mariela cuando está frente a sus empleados, en sus empresas?
La misma. Yo soy como soy. Pero sí trato de mejorar, que Dios me ayude todos los días.

(Cuenta que pertenece a CENTI -Centro Ecuatoriano de Teoterapia Integral-. “Yo me preparo, voy a CENTI dos veces a la semana a seguir cursos de formación, de estudio de la Biblia y es maravilloso conocer cada día más a Dios. A él le pido todo”, afirma. El foro termina. Los estudiantes pronto empezarán a salir. Mariela se levanta de la escalera y baja a la primera planta. La esperan las personas que le solicitaron fotografías y autógrafos).

Datos: Temporada
Funciones
La obra teatral Las burladas por Don Juan se presenta hoy, a las 20:30, y mañana a las 19:30, en el Teatro Sánchez Aguilar (Samborondón).

Entradas
Los precios son: platea A, $ 40; platea B, $ 30; y platea C, $ 20.