El tener la visión de crear algo que parezca real y que al mismo tiempo sea funcional es lo que suele buscar Rodolfo Cuadros en su trabajo.

Este guayaquileño de 48 años, lleva 11 de ellos dedicados a la caracterización de personajes. Desde la manufactura de trajes de superhéroes hasta la creación de personajes desde cero. Algo que es su pasión y su primera fuente de ingresos.

Ha trabajado en publicidad, cortometrajes, programas de televisión, cine y otros proyectos personales.

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Afirma que el talento lo heredó de su padre, un diseñador y decorador que vino desde Argentina y trabajó para varias cadenas de almacenes y también hacía maquetas y juguetes, entre otras cosas, para clientes particulares. Además cada vez que iban al cine le explicaba sobre los efectos visuales que había en las cintas.

“Él vio que yo era el único de mis hermanos que apetecía de ese arte y comencé a trabajar con él (...). A los 12 años hice mi primera maqueta, que eran armas bélicas de la segunda guerra mundial, luego robots y naves de cartulina”, cuenta.

Con el pasar del tiempo y de forma autodidacta aprendió a esculpir, diseñar, sobre pintura e incluso química, algo que le permitió crear su propio material (una pasta) para crear máscaras u otras formas que se pueden adherir al cuerpo. Actualmente trabaja en algunos planes entre los que están unas caracterizaciones algo ‘terroríficas’ para un proyecto.

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Un personaje común en sus caracterizaciones es el Depredador, del cual tiene un traje hecho todo a mano. De igual manera construyó uno de Batman con varios accesorios. En ambos muestra su cuidado por los detalles y los hizo para él porque cree que en su área lo que mejor habla de un profesional son sus creaciones, refiere. (E)