Está sentada frente al espejo y a su alrededor, un equipo de maquilladores y estilistas la preparan para la sesión de fotos y videos que se presentarán en los promocionales de la nueva temporada de Los hackers de la farándula, que ahora se denominará Los hackers del espectáculo.

En su futuro, el trabajo frente a las cámaras no era lo planeado, pero sus experiencias universitarias mientras estudiaba la carrera de Ingeniería Comercial con mención en Finanzas la acercaron a su presente laboral. Conny Garcés Medina es una comunicadora empírica que se ha abierto paso en la pantalla, en distintas plataformas, hasta llegar a los estudios de Ecuavisa desde su reciente participación en el reality Desafío a la fama, donde se convirtió en una de sus finalistas.

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“Me gradué de ingeniera con mención finanzas, una carrera que no tenía nada que ver con comunicación social. Yo hacía de presentadora en el canal de la universidad y todos creían, hasta mi familia, que estudiaba eso. Una profesora que me daba clases de Finanzas me dijo: ‘Yo a usted no la veo en esta carrera, gradúate de ingeniera y de ahí saca el título’”, menciona Garcés.

“Antes de entrar a la televisión trabajé de asistente en un bufete de abogados, trabajé en el Registro Civil, que de ahí prácticamente me sacan al medio de comunicación, desde que tengo 16 años mi papá tenía su propia mueblería y los negocios familiares existen. Tú me encontrabas en la mueblería haciendo inventario, limpiando los muebles, vendiendo. Yo he trabajado desde chiquita. Mi papá nos enseñó que hay que trabajar” sostiene.

Producciones previas

Aún aspira a convertirse en periodista profesional, sin embargo, su vínculo con este campo viene desde el 2018. Su primer programa fue Intrusos, como presentadora. “Yo siempre he dicho que entré pisando fuerte. Mis respetos para todos los reporteros, es un trabajo durísimo tratar con el talento, buscar la nota, buscar primicias. Yo entré directamente como panelista y comentarista de farándula”, recalca.

Con 28 años, la joven esmeraldeña, inscrita en Guayaquil, también fue parte de un espacio denominado Mariela te transforma, con Mariela Viteri; de Amigos de miércoles, Volvemos con todo (Intrusos) en plataformas digitales.

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“Desaparecí como un año para dedicarme a temas personales, tengo mi tienda de ropa online, que ya tiene bastante tiempo. Luego de ese año nace la propuesta de Desafío a la fama, también me llamaron cuando estaban en la búsqueda de la quinta hacker, que es cuando entran Marián (Sabaté) y Carolina (Jaume). Me mencionaron el reality de famosos y yo no soy famosa, así que dije que no. Pero soy muy creyente de que todo pasa por algo”, dice.

Ingreso a Ecuavisa

Una segunda propuesta del Canal del Cerro es el impulso que Garcés necesitaba para decidirse a firmar contrato. “Me dije ‘tengo que tomarlo porque si no, no me volverán a llamar’. Entonces, así es como entro. De alguna manera, creo yo, he sido agradecida con cada una de las oportunidades que se me han dado, por pequeñas o grandes que sean. Yo siento que Desafío a la fama (DALF) fue un reto totalmente, pero permitió que el público conozca a Conny Garcés humana, la mujer, la hija, la hermana. No la presentadora de farándula”, agrega.

En medio de tus confrontaciones con otros participantes, durante el reality DALF mantuviste la calma para expresarte sin atacar a otros, ¿cómo lo lograste?

Yo entré a la casa sabiendo lo que se podía dar, no con ventaja como dijeron algunos de mis compañeros, porque los televidentes estábamos una semana atrasados a lo que sucedía en casa, en la casa ya había amigos, si ustedes se dieron cuenta a mí no me querían en la casa y yo tenía ciertos enfrentamientos con algunos de los talentos que ya eran amigos y equipos y ya tenían sus estrategias. Yo considero que siempre hay que dar la esencia de uno, no soy una perita en dulce porque no lo soy, se me vio bastante enérgica, se me vio llorando, riendo. Se me vio en todas las facetas y de ninguna me arrepiento.

Cuando nosotros hacemos de comentaristas de farándula, nos vestimos, nos maquillamos y nos sentamos a comentar de alguien, pero tú no logras ver mi corazón a través de la pantalla, tú no sabes lo que a mí me duele, tú no sabes lo que de pronto a mí me llega a gustar y Desafío a la fama sí fue una plataforma que ayudó a todos los que estábamos ahí adentro de forma humana

Conny Garcés, comentarista de farándula

¿Saliste de la producción con amigos?

No, amigos para mí es una palabra muy importante y no se la puede decir a cualquier persona. Hice una persona cercana, que la considero cercana porque en muchos momentos me identificaba con ella, que es Emma Guerrero, por una etapa de su vida en la que también fui señalada, juzgada, por hombres y mujeres.

¿De qué forma fuiste señalada?

Con palabras bastante fuertes, agresiones verbales.

¿Las personas que te señalaron estaban en el programa?

Claro, dentro de la casa se vivió uno de los retos que obviamente me pusieron una palabra bastante fuerte, pero que dentro del medio de la farándula me la habían dicho antes, a eso es a lo que voy cuando digo que yo ya estaba preparada para ser atacada. En un reality todo se vale, bueno o malo. No te voy a negar que estaba preparada pero me dolió, porque afuera del programa estaban las personas que me quieren.

Soy un ser humano y no te voy a negar que muchas veces quería alzar mi voz y quizás decir palabras fuertes, que no te voy a negar que sí las digo, pero cuando estamos en un momento de una discusión y más si es acalorada. No quien grita tiene la razón, no quien insulta tiene la razón, al contrario, demuestra toda la debilidad, porque la persona que insulta cree que está teniendo un poder sobre ti y es al contrario, quien te habla en tono neutral te está ganando. Y creo que eso pasaba conmigo.

‘Hackers del espectáculo’

“Me siento orgullosa de mí, me siento agradecida con la oportunidad, siento que a las personas buenas nos va bien”, revela mientras hace una pausa y la emoción la sobrepasa hasta quebrarle la voz.

¿Pensabas trabajar en Ecuavisa?

Siempre se supone que cuando ya empezamos algo, empezamos a proyectarnos y dentro de mis proyecciones sí estaba Ecuavisa, sí estaba volver a entrar a un canal de señal abierta y estoy muy contenta de que la oportunidad se diera. Poder callar bocas, porque siento que antes de esto sí hay personas y talentos del medio que son muy crueles y que piensan que por su trayectoria y años de carrera tienen que humillar al resto, decirle a alguien que quizás tiene un sueño ‘nunca vas a llegar a pisar tal cosa’. A mí me dijeron en un canal, pero quizás para otros puede ser un trabajo o cualquier situación, es duro y cruel.

¿Qué te enseñaron ellos (tus detractores)?

A ser fuerte y a no dudar de mí, porque creo que en algún momento yo era la que dudaba de mí misma y por eso yo me limitaba, y con todo lo que viví he aprendido a ser muy fuerte, aunque hay momentos en los que me quiebro.

Ingresas ahora a un programa en el que muchas veces fuiste criticada, ¿cómo te sientes?

La vida da vueltas. ¿Sabes qué? A nivel de farándula siempre vamos a tener diferentes comentarios, va a haber momentos en los que nos tiren flores y nosotros las recibamos con alegría y va a haber momentos en los que nos tiren piedras. La farándula muchas veces es así y ojo, que te tiren piedras no quiere decir que te falten al respeto. Yo tengo que darte una crítica constructiva. Yo he hecho farándula, no tanto como los talentos que están en Hackers, pero nunca he tratado de llevar la parte venenosa. Siempre me ha gustado dar un comentario con todo el respeto, como me gustaría que comenten sobre mí.

Si el canal te planteara en algún momento trabajar en otro espacio con talentos como Don Day y Carolina Jaume, ¿lo harías?

Después de Desafío a la fama yo aprendí a ser profesional y a poder trabajar con cualquier persona. Así que sí, porque estamos en un año en el que no podemos decirle que no al trabajo, mientras a uno lo respeten yo trabajo con quien sea.

¿Qué no harías por trabajo?

De lo que siempre me han juzgado, siempre me han tachado de prepago. La gente se confunde por cómo te ve, porque te ve muy sexy, y no es así. Yo he trabajado con mi papá desde muy pequeña y sé lo que es ganarse el dinero.

¿Y dónde te ves dentro de cinco años?

No lo pongamos muy lejos, en este mismo año yo me veo en En contacto. Me encantaría estar en un matinal, siento que es una faceta diferente, siento que ya he hecho farándula y me gustaría probar en un matinal, no te llego a los cinco años, estoy decretándolo. (E)