“De la tierra nace y me alimenta”. Era la frase que llevaba una joven empresaria de 26 años en la marcha Marihuana Guayaquil 2018, que se desarrolló el sábado pasado en el norte y centro de la ciudad.

La joven, que prefirió mantener su nombre en reserva, repetía: “La droga es la que se fabrica con químicos, esto (marihuana) nace de la tierra”.

Ella iba con su esposo, de quien comentó sufre de epilepsia. “La usa como medicina, le disminuye las crisis, consume moderado”, mencionó la mujer y añadió que con fármacos persistiría el malestar.

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Ellos eran parte de un grupo de al menos 300 personas pertenecientes a la Comunidad Canábica de Guayaquil, que se habían convocado para la caminata, que empezó en el parque de la ciudadela Kennedy.

En una pancarta plasmaron el mensaje: “Contra el narcotráfico, autocultivo”, al tanto que voceaban: “Somos conscientes, no delincuentes”.

Andrés, quien labora en una agencia bancaria, sostenía un cartel en el que se leía: “Liberen a María (Marihuana)”. Dijo que solo consume al salir de su trabajo para “liberar el estrés” y que no se consideraba adicto, porque tenía días de abstinencia.

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Actores, empresarios, publicistas, comerciantes, estudiantes constaban entre los participantes. Los había de diferentes edades, géneros y clases sociales. Todo un colectivo.

La mayoría está conectada a través del Facebook Guayaquil Canábico, que tiene 10.912 seguidores. Allí se convocan para marchas y otras actividades.

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En aquella red promueven la legalización del cannabis para el autosembrío y uso medicinal “moderado”.

La marcha, que el viernes se efectuó en Quito y en otras ciudades del mundo por el Día de la Marihuana, recorrió la avenida Delta. Luego avanzó por Tungurahua y de ahí giró por 9 de Octubre. Terminaron en el parque Centenario, en la calle Pedro Moncayo.

Allí, una joven habló sobre derechos y propósitos comunes. Se tomaron una foto general. Luego, policías que estaban vigilantes insistieron en que se mostrara el permiso de la marcha. No lo hicieron, así que agentes pidieron el retiro.

Allí se iniciaron altercados con personas que no se dejaron requisar o que no querían alejarse de ese espacio público.

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Hubo temor entre peatones. Luego se retuvo a un joven, que minutos después fue liberado. La policía insistió en que el Colectivo mostrara permisos. No lo hizo hasta las 17:00. (I)

Hablaron de derechos
Organizadores de esta comunidad dieron a conocer los derechos constitucionales “a no ser criminalizados”, según el artículo 364 de la Constitución. Así como a la tenencia de una dosis máxima de consumo de sustancias. El art. 66 que da derecho a reunirse y manifestarse en forma libre y voluntaria, al libre tránsito, a practicar, profesar en público o en privado las creencias y a difundirlas individual o colectivamente. (I)