Tres veces al año, en las escalinatas del cerro Santa Ana, los vecinos organizan el festival de juegos tradicionales para que los niños se unan. Lo hacen en junio, por el Día del Niño; en julio, por las fiestas por el proceso fundacional de Guayaquil; y, en octubre, a propósito de la independencia de la urbe porteña.
Las nuevas generaciones aprovecharon la mañana y tarde de este sábado, 13 de julio, para disfrutar de juegos de antaño, como la rayuela, la competencia de llevar un huevo en una cuchara, lanzar trompos y a los ensacados, que consiste en saltar hacia la meta con las piernas metidas en sacos.
Juegos tradicionales guayaquileños para disfrutar en el feriado de octubre
Silvia Vélez, presidenta de la Asociación Cerro Santa Ana, coordinó el evento en el que participaron también algunos niños que llegaron de paseo a la zona con sus familias.
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Ella expuso a los niños cómo sostener la cuchara en la boca y contaba que, en algunos casos, se juega también con un limón para evitar que el huevo se reviente. Este sábado, ella hirvió los huevos y luego del juego, los niños se los comieron.
En las escalinatas, los menores también jugaron a las escondidas y hasta a las bolichas.
Sus padres les enseñaron cómo enrollar el trompo y cómo lanzar las bolas de cristal para chocarlas. Para algunos, esta era su primera experiencia con estos juegos tradicionales.
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Braulio Mendoza, quien llegó con su hijo Justin, recordó que hace más de 20 años que no jugaba con un trompo y sostuvo que la actividad le trajo felices recuerdos de su infancia.
Andreína también fue parte de la jornada en el cerro Santa Ana. Ella paseaba por el sector turístico cuando vio a los niños jugando a los envasados y sus niños se unieron al juego.
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El festival arrancó en la escalinata siete a las 11: 30 y terminó a las 16:00 en la zona del Faro, ubicado en la escalinata 444. (I)
