Uno de los alumnos de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) logró ingresar a la Paris-Saclay University, considerada como la mejor universidad de Europa en matemáticas.
Alexander Palma, un politécnico que reside en un recinto de Jujan, cantón de Guayas, logró una beca para realizar sus estudios de posgrado en ese centro universitario de Francia.
Graduado de la carrera de Matemática en la Espol, Palma logró esa beca luego de que su tutor del proyecto de graduación, el profesor politécnico Christian Galarza, lo instó a seguir preparándose y le mostró oportunidades de posgrado en el extranjero. Él lo animó a postular.
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En esa búsqueda, este politécnico fue admitido en dos posgrados en Matemáticas en Brasil, obteniendo una beca completa en uno de estos: el Instituto de Matemática Pura y Aplicada (IMPA).
Al mismo tiempo, la Asociación de Matemáticos Ecuatorianos en París realizó gestiones y logró que la fundación Jacques Hadamard, de Francia, otorgue una beca de excelencia académica a Palma. Con ello fue admitido al posgrado en Matemáticas de la Paris-Saclay University.
Durante su etapa como estudiante en la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas, Alexander participó en importantes competencias. Estuvo en la Olimpiada Ecuatoriana de Matemática del 2018, en la que se ubicó entre los finalistas. Además estuvo en la XXIV Olimpiada Iberoamericana de Matemática, en el 2021, en la que obtuvo la medalla de bronce.
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Palma también fue a la International Youth Math Challenge, en la que se ubicó entre los finalistas.
Este politécnico viajaba todos los días a Guayaquil para seguir su carrera en la Espol. Cuando ingresó a la Espol no se mudó al Puerto Principal, sino que decidió viajar todos los días para no perder contacto con su familia. De esa manera, aunque regresaba a su casa alrededor de las diez de la noche, siempre veía a su padres y hermanos antes de dormir.
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Ya en Francia, Palma está poniendo sus esfuerzos para culminar con éxito el posgrado que cursa, pues le gustaría continuar con un doctorado y quizá un posdoctorado.
Dice que pretende regresar a Ecuador y aportar al desarrollo de las matemáticas en el país, con investigación, para inspirar a nuevas generaciones.
“No me considero un genio en matemáticas, pero estas me encantan. No se trata de ser un genio, sino de esforzarse, porque las cosas que realmente valen la pena requieren de trabajo duro”, señala. (I)
