Sergio Peña fue expulsado de la bancada de la Revolución Ciudadana (RC) la tarde del 29 de mayo pasado, y para la sesión plenaria de este 30 ya lo habían cambiado de puesto. Antes se sentaba en la curul 53, junto con Mireya Pazmiño y cerca de Ricardo Patiño. Ahora está al lado de Mónica Salazar, que también era de la RC, pero se distanció antes de la sesión inaugural, el 14 de mayo.
Peña, quien es parte de la Comisión de Desarrollo Económico, votó a favor del informe para primer debate de la ley urgente de economías criminales, pese a que en su bloque le ordenaron que se abstenga.
Los dirigentes de la RC lo llamaron traidor, pero él no se quedó callado y los tildó de “manzanas podridas” porque quieren imponer sus opiniones.
¿Cómo llegó usted a la Revolución Ciudadana?
En redes sociales yo ya era conocido, en ese momento tenía más de 300 mil seguidores, ahora muchos más. La invitación vino por Andrés Arauz, con quien empezamos a hacer lives. Yo nunca he sido correísta y se los dije, pero la idea de país que teníamos era la misma. Entonces yo dije bueno, vamos a trabajar por eso, que las cosas que están mal se cambiarán. Yo siempre me mostré propositivo y en oposición a las cosas malas que tengan los gobiernos, así lo hice desde la época de Lasso. Esa era la idea. Me dijeron que me iban a poner en el puesto 7 para tratar de arrastrar un poco a los de arriba. Las votaciones deberían ser uno a uno, ahí vemos quién es quién, si se llega por el partido o por ser conocido.
¿Usted nunca fue militante?
No, había un respeto hacia el proyecto país que hoy en día no se traduce en la realidad, porque algunos están pensando de manera individual.
¿Tiene cercanía con RETO?
Me llevo bien con todos los asambleístas, pero no conozco nada de esa alianza; yo fui invitado por RC.
Luisa González lo cuestionó por el voto en la Comisión de Desarrollo Económico, ¿cómo fue su relación en la campaña?
La conocí en la campaña, pensé que teníamos la misma idea de país, pero ya estamos viendo que están tomando actitudes individuales, y nunca estaré a favor de eso. Las cosas deben hacerse en consenso.
¿Cómo actitudes individuales?
Literalmente, ‘esto vamos a hacer, tienes que alinearte’.
¿Eso le dijeron?
Sí, en la votación (del proyecto urgente del Gobierno) me dijeron ‘vamos a votar de esta manera y tienes que alinearte’. Oye, nunca conversaron conmigo de mi respuesta. Yo estoy en la comisión, he hecho aportes, ustedes no han mandado sus aportes, cómo puedo decir que no si al final mis aportes son elegidos. Y de hecho sí fueron ingresados en mi proyecto de ley y no podía ser incoherente.
¿Por ejemplo?
La prisión preventiva, que el Gobierno quería que sea una regla general, queda como está, y es una regla excepcional. En el tema de detenciones, se pretendía que fueran dispuestas por un Bloque de Seguridad, hoy se cambió por la aprehensión que la puede hacer cualquiera, pero bajo el control de un juez anticorrupción. Se buscaba inventar nuevos jueces, pero no pasó, pues ya hay unos que pueden encargarse de estos temas (seguridad, crimen organizado, narcotráfico), los anticorrupción. Es decir, todo lo que atemorizaba, los allanamientos, detenciones arbitrarias, los objetivos militares, ya están plasmados en el proyecto para que sea técnico y evitar cualquier tipo de abuso. Los gobiernos son transitorios, el Estado es lo que queda.
¿Y usted expuso los cambios que consiguió ante su bancada?
Es que no hubo cómo porque nunca se me consultó, no conversaron conmigo. Imposible exponer cuando no se te consulta. Solo me dijeron esto hay que hacer.
¿Cómo le pidieron que vote?
El día lunes, y esto lo pueden ver si es que hay cámaras, Viviana Veloz se me acercó a la curul y me dijo vamos a votar de esta manera y tienes que alinearte.
¿Le dijeron que se abstenga?
Si, abstención.
A usted lo propuso ADN para ser parte del Consejo de Administración Legislativa (CAL), ¿por qué no tuvo el apoyo de su bancada?
Todo eso fue una sorpresa. Faltó un voto, recordemos eso. Ese voto pudo ser el mío. Yo voté con la bancada, no voté por mí respetando su decisión, sin exponer en redes sociales los problemas. Ese día, y lo pueden ver si revisan los videos, Viviana Veloz se vira y dice: ‘Si no voy yo, no va nadie’. Yo respeté esa posición aunque no la compartía. Me mostré leal a los principios, aunque me pareció una imposición. En el caso de la ley, quien expuso los problemas fue Luisa González, y yo, callado, no me voy quedar.
Usted ha dicho que son tres o cuatro personas las que deciden en la RC. ¿Cómo actúan?
Sí, son tres o cuatro que hablan por la bancada, pero son ellos los que toman las decisiones. A los demás no se nos da la oportunidad de opinar y al final se nos dice esto es y así hay que votar. Eso está mal.
¿Qué pasará con usted en adelante?
Seré un asambleísta independiente peleando por los ecuatorianos.
¿Independiente o alineado a ADN?
Independiente. En este caso, la votación en la Comisión fue sustentada porque mis propuestas son aceptadas.
¿Usted ha dialogado con el Gobierno sobre el proyecto?
Valentina Centeno, de ADN, es la presidenta de la mesa; conversamos y le dije cuál sería mi postura. Yo voy a trabajar a favor del país. Tuvimos una discusión con los asesores sobre mis proupuestas, y al final hasta el Comando Conjunto me dio la razón. Y me dijeron, como caballeros, usted no se equivocó. ¿Cómo puedo oponerme a algo que va contra el combate a la delincuencia en el país? La gente necesita respuestas, el circo déjenlo para los payasos.
¿ADN puede contar con su voto entonces?
En este proyecto de ley, si seguimos mejorándolo, sí. Pero si los aportes que se hagan en el tema económico no se acogen difícilmente contarán con mi voto. El apoyo no será ciego. (I)