Llegó presuroso y así se marchó de la Fiscalía del Guayas, ayer por la mañana, Douglas Campos Crespo. Fue ahí a rendir su versión sobre lo ocurrido la noche del pasado 4 de octubre, cuando supuestamente su esposa, María Isabel Rodríguez Avilés, recibió la llamada de su hermano, Roberto Eliut Campos Crespo, para decirle que había agredido a María Fernanda Fernández de Córdova Flores y que ella no reaccionaba.