Clímaco Cañarte, un símbolo canario, enfrentó al Real Madrid –de Alfredo Di Stéfano, del arquero argentino Rogelio Domínguez y del zaguero uruguayo José Emilio Santamaría (luego fue técnico de España en el Mundial de 1982)– y al FC Barcelona de Sandor Kocsis, del paraguayo Cayetano Ré y de los charrúas Ramón Villaverde y Luis Cubilla.

“Era otro tiempo. El fútbol era más vistoso, se jugaba hacia adelante. Había mucha técnica, más picardía”, dijo Cañarte respecto a los duelos contra merengues (1961) y catalanes (1962).

“El Real Madrid, en esa época, era mucho mejor que el Barça. Recuerdo un estadio abarrotado en ambos juegos. Nos distinguíamos por la garra y nos agrandábamos ante los gigantes y no había temor de medir a los mejores del mundo. Yo me crecía”, relata el expuntero zurdo de los amarillos.