El Manchester City de Manuel Pellegrini, Sergio Agüero, David Silva, Jesús Navas y demás aguarda al Madrid. Prueba difícil, más que la de Wolfsburgo, de donde el Real Madrid regresó con un mal resultado que forzó luego a una bella remontada (ingleses y españoles juegan hoy semifinales de ida de la Champions).

Así que advertido ya va el Madrid, que sabe que en su virtud tiene su pecado: tres grandes delanteros, con enorme capacidad de gol, pero con poco compromiso hacia atrás, salvo en casos excepcionales. No hace mucho el problema era mayor, porque encima los tres del medio campo eran mediapuntas vocacionales. Ahora, con el brasileño Casemiro, que sí tiene naturaleza de medio centro, el problema se atenúa algo.

El Madrid ganó en el estadio Camp Nou (1-2 al Barcelona) porque los tres de arriba hicieron esfuerzos hacia atrás que nunca hacen. Hoy hará falta eso mismo. Pero la pega es que dos de ellos, Cristiano Ronaldo y Karim Benzema, van entre algodones. Tan es así que Zinadine Zidane vuelve a tirar de Borja Mayoral (delantero juvenil surgido del filial Castilla) por si las moscas, aunque si falta el francés Benzema (me parece que es el que está más delicado) quizá se incline más bien por Lucas Vázquez. Trabaja en el medio campo y ataca con insistencia y peligro. Ha sido el jugador-revelación de la plantilla del Madrid este curso. Ha jugado bastante poco, pero siempre bien en todos los sentidos.

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Uno que ha jugado mucho y bien es el arquero costarricense Keylor Navas, al que supongo que hoy exigirá el Manchester City. Empezó la temporada estelar, con milagros que sostuvieron el bulo del ‘equilibrio’. Bajó algo por molestias de pubalgia, pero pronto recuperó su condición de portero salvador. Con él en un área, la capacidad de gol en la otra, el sabio penduleo de Casemiro y el tic-tac de Luca Modric, el Real Madrid es un poder en este final de temporada. Si es con Daniel Carvajal, mejor. Ha sido baja por unas molestias musculares (¡cuánto ha sufrido eso esta campaña el Madrid!), pero se supone que estará. Cabe confiar. (O)