Intratable en la escena doméstica, el FC Barcelona volvió a sucumbir el martes en Europa cayendo de la peor manera ante Liverpool en semifinales de la Liga de Campeones, malgastando una ventaja de tres goles en un partido que deja tocado al equipo azulgrana y a varios de sus jugadores.

"Ahora mismo estamos tocados", reconocía tras el encuentro el técnico Ernesto Valverde, tras caer eliminado con otra remontada imposible.

Si la derrota en Roma el pasado año en cuartos de final fue dolorosa, tras perder 3-0 después de acudir a la capital italiana con un 3-1 a favor, peor ha sido esta caída al perder 4-0 yendo a Anfield con un 3-0 de renta.

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"Sonrojo", "el mayor ridículo de la historia", "fracaso histórico", la prensa española no se anduvo con paños calientes este miércoles al titular lo ocurrido en Liverpool.

Aunque todavía con posibilidades de repetir doblete Liga-Copa, el Barça ve como se le escapa otro año más esa "linda copa" de Europa, que Lionel Messi quería devolver al Camp Nou esta temporada, cuatro años después de su triunfo en 2015.

El argentino soñaba con ganar su quinta Champions, pero parece que tendrá que esperar al próximo año, mientras esta derrota supone un tropiezo en su impecable carrera hacia el Balón de Oro esta temporada.

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El futuro de Valverde

El entrenador, aunque recién renovado, parece estar ahora en la cuerda floja, tras caer por segundo año de manera estrepitosa en el que era el gran objetivo del club azulgrana.

"Valverde podría ganar su segundo doblete consecutivo (Liga-Copa) y sin embargo la sensación que queda es de gran decepción, porque un año más no se ha podido construir un equipo competitivo para la Champions", escribe en su columna el director del diario Sport, Ernest Folch.

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Aunque Valverde renovó recientemente con el club azulgrana, la debacle en Anfield podría pasarle factura y él mismo no se atrevía a hacer pronósticos sobre su futuro.

"No lo sé (qué pasará)", respondía a los medios tras el encuentro el técnico azulgrana.

El golpe ha sido duro, pero el presidente barcelonista, Josep Maria Bartomeu, no quiere tomar decisiones precipitadas.

El Barça apunta ahora a la final de Copa del Rey contra el Valencia el 25 de mayo, pero es difícil que este título consiga borrar el mal sabor de boca dejado por Anfield. (D)

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