Quien ve correr a Kiara Rodríguez (18 años) en una pista se convence de que cualquier barrera física del ser humano termina siendo solo mental. La medallista de bronce en salto largo (con 5,63 metros) de los Juegos Paralímpicos de Tokio volvió a su rutina normal de entrenamiento en Guayaquil, pero con nuevas metas. La inmediata es participar en el Sudamericano Sub-23 en el puerto principal del 16 al 17 de octubre (atletismo convencional); y su objetivo, a largo plazo, es el oro paralímpico.