“Uno está ilegal y creí en quienes dijeron ser abogados”. Una migrante indocumentada, trabajadora del campo, cayó en las garras de un grupo de estafadores. Estos se movían diciendo que eran abogados y andaban en oficinas de inmigración virtuales. Contaban hasta con un falso cónsul. A José lo engañaron otros delincuentes que tienen hasta a una mujer que entrevista como si fuera jueza.
Isabel, nombre con el que prefiere identificarse la víctima de esos impostores, contó a Univisión Noticias que “confió en ellos por la desesperación”.
Esa gente se hizo pasar, en redes sociales, como abogados y dijeron que la ayudarían a regularizar su estatus migratorio en Estados Unidos.
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Un falso cónsul en oficina virtual
El modus operandi de esta organización delictiva, que envolvió a Isabel, es más complejo y peligroso. Engañan a los migrantes poniéndolos a hablar hasta con un supuesto cónsul.
A esta mujer ese “cónsul” llegó al punto de entrevistarla mediante videollamadas.
Ella vio la decoración de la oficina y le pareció que el hombre sí era funcionario del Gobierno.
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“Detrás de él había banderas de Estados Unidos y vi computadoras. Era como una oficina real”, narró a la periodista Vilma Tarazona.
Ese hombre se comprometió en entregarle la residencia permanente.
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El dinero de Isabel cayó en saco roto. Isabel fue engañada: “Les envió 8.400 dólares”.
La falsa jueza tiene una foto de Trump a un lado, dice José
José es hondureño y contó, en Florida, que también fue víctima de una estafa similar.
El grupo que le mintió a José cuenta con una mujer que dice ser “jueza”. Esta igualmente lo entrevistó y montaron la escena con más producción: la “magistrada” estaba en “una corte”.
Al verla por videollamadas, José detalló que decía corte de inmigración y Department of Homeland Security (Departamento de Seguridad Nacional).
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“Tenía el escudo, la bandera de Estados Unidos y hasta la foto del presidente Donald Trump, a un lado”, recuerda José.
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La falsa jueza le solicitó 10.000 dólares; él le envió más de $7.000 a los impostores.
Isabel denunció
En su reporte, Vilma Tarazona informa que Isabel expuso su caso a la Policía, denunció a los estafadores y han pasado tres meses. Ningún agente la ha contactado. (I)