Viviana Troya tiene 24 años y aunque hace dos obtuvo una Licenciatura en Terapia de Lenguaje hoy es una de las 175 mujeres que aspiran a convertirse en agentes de control metropolitano para la ciudad de Guayaquil.
La joven cuenta que aunque encontró un par de trabajos temporales, no logró estabilidad en su carrera, por lo que con el apoyo de su familia y de su pareja se postuló en la convocatoria que lanzó en noviembre pasado la Empresa de Seguridad Municipal (Segura EP) para seleccionar a 700 nuevos metropolitanos.
Para Viviana las pruebas académicas y físicas resultaron fáciles y está entre las mejores puntuadas. Ella vive en el sector de La Florida y asegura que no solo el sueldo y tener un trabajo fijo con prestaciones la motivaron a postularse sino también la idea de ayudar a mejorar la ciudad.
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“Hay mucho descontrol en todas partes y quiero ser parte de la solución”, mencionó Troya, quien junto a otro tres jóvenes con altos puntajes, estaba en primera fila en el evento que este jueves, 29 de febrero, se dio en el Aula Magna de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG), donde fueron presentados los 700 seleccionados.
Este jueves iniciaron el curso que durará seis meses y que se impartirán en doble jornada.
Entre los aspirantes que pasaron la pruebas están también algunos universitarios que están a punto de culminar sus estudios superiores.
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Jesús Saa, también de 24 años, estudia Finanzas e ingresó al proceso de selección también en busca de estabilidad.
Dice estar dispuesto a no estudiar un semestre para convertirse en agente de control metropolitano y espera que cuando ya esté trabando poder culminar su carrera universitaria.
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Este joven guayaquileño quiere colaborar con los gastos de su casa y espera más adelante poder hacer carrera en el Cuerpo de Control Metropolitano al tener un título de ingeniero en Finanzas.
Dana Mosquera es otra universitaria que postuló y pasó las pruebas. Ella tiene 20 años y estudia Derecho en la Universidad de Guayaquil.
Le gustaría desarrollar ambas carreras en el futuro y también espera ser parte del cambio de la ciudad.
Dana fue deportista y practicó atletismo por lo que para ella también las pruebas físicas fueron fáciles.
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Óscar Andrade es otro aspirante que este jueves empezó la capacitación. Tiene 19 años y cuenta que dejó un trabajo temporal que había obtenido en un supermercado.
Antes de eso postuló en dos universidades pero por el puntaje no obtuvo un cupo en la carrera que aspiraba.
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A él las pruebas físicas no le resultaron tan fáciles. Sostiene que en grupos de 150 aspirantes fueron a la Infantería de Marina e hicieron abdominales, pruebas de rapidez y otros exámenes. De esos grupos se seleccionaba a 70 que daban las pruebas académicas.
Incluso les tomaron pruebas psicológicas y se entrevistaron con una psicóloga clínica para asegurarse de que estén aptos para el contacto con la ciudadanía.
Aunque a Óscar le hubiera gustado convertirse en ingeniero en Sistemas, dice estar agradecido porque obtuvo un cupo para entrar a la capacitación y graduarse como agente de control metropolitano, lo que ocurriría a finales de agosto, si pasa las materias que incluye Inglés, Ética, Medio Ambiente, Resolución de Conflictos y Derechos Humanos. (I)
