Guayaquil es la ciudad más poblada del Ecuador (2′746.403 habitantes, según el más reciente censo) y eso se refleja en el número de precooperativas y cooperativas que han surgido en los últimos diez años, sobre todo en zonas del noroeste y sur de la urbe.

En la última década el registro de estas unidades de vivienda se duplicó. Al 2024 se evidencia un crecimiento del 106 % comparándolo con el 2014.

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La llegada de personas de otras localidades del país e incluso la migración desde otros sectores de la ciudad, que luego se asentaron y formaron comités populares, dieron paso a la creación de algunas de las comunidades que ahora forman parte de los registros que tiene el Municipio de Guayaquil.

Ciudad de Dios, el enorme cordón de pobreza de Guayaquil que queda por legalizar y dotar de servicios

Luis Ceverino es uno de los que llegó hasta el sector de San Luis, en Ciudad de Dios, la última cooperativa del gran sector conocido como Monte Sinaí, en el noroeste. Hasta allí, prácticamente, termina la zona urbana del Puerto Principal.

Ceverino se asentó en ese sitio hace ocho años junto a otras personas que abandonaron departamentos de alquiler en zonas como La Alborada y Sauces, en el norte, y Guasmo, en el sur. Todos se movieron para cumplir el deseo de tener su casa propia.

Un conocido le dijo que había terrenos a $ 3.000 en esa zona del noroeste para levantar viviendas sencillas. Él no dudó en gastar sus ahorros y construir de a poco una pequeña villa.

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Así como Ceverino, cientos de familias se asentaron no solo en San Luis sino también en Divino Niño y otras zonas dentro de Monte Sinaí. En esos sectores, algunas personas empezaron con casas de caña que luego las convirtieron en viviendas de cemento.

Año<b>Cooperativas <br/> y precooperativas</b><b>Crecimiento</b>
<b>2014</b>356
<b>2019</b>3847,8 % (2019 vs 2014)
<b>2024</b>73391 % (2024 vs 2019)

Ciudad de Dios es parte de las 733 precooperativas y cooperativas que hay en la ciudad registradas hasta este 2024. Hasta el 2014 eran 356 y al 2019 se elevaron a 384. Es decir que en diez años esta categoría se duplicó en la ciudad.

Si bien se han elevado -en los últimos 10 años- otras categorías de vivienda como ciudadelas y urbanizaciones, el crecimiento ha sido sostenido en cada lustro en precooperativas y cooperativas.

En febrero de este año, el Municipio aprobó el plano único de regularización urbanístico de Ciudad de Dios, sector 11. Con ello se convirtió en el último barrio legalizado.

La precooperativa Casitas del Guasmo es una de las primeras que se tiene registro en la ciudad. Nació en 1975 con 500 socios. Colinda con la cooperativa Los Jazmines y Río Guayas, en el sur de la urbe.

La mayor parte de estas precooperativas y cooperativas están en el Guasmo oeste, Floresta, Río Guayas, Unión, isla Trinitaria, Florida, Mapasingue, Prosperina, Mi Lote, Monte Sinaí y Sergio Toral.

300 moradores de Ciudad de Dios inician trámite para legalizar sus predios

¿Cómo se conforman precooperativas y cooperativas en Guayaquil?

La Dirección de Urbanismo, Movilidad, Catastro y Edificaciones (Dumse) explica que las precooperativas o cooperativas son creadas, impulsadas y desarrolladas por los propios sectores populares a través de organizaciones existentes, partidos políticos y dirigentes representativos, con el claro fin de atender las necesidades de tierra y vivienda.

Pueden ser creadas y desarrolladas por lotizadores particulares, comunidades a través del cooperativismo o, incluso, especuladores inmobiliarios que buscan obtener beneficios económicos a costa de las necesidades de vivienda de grandes sectores de la población.

Este último factor, detalla el cabildo, ha derivado en que existan proyectos urbanísticos sin regularizar. Al momento, en Guayaquil hay 82 barrios que no se encuentran regularizados, pero ya están en proceso.

En Ciudad de Dios, el Municipio ha notificado a las familias para que inicien el trámite para legalizar terrenos. A inicios de marzo, 300 moradores iniciaron el proceso en el cabildo.

Las urbanizaciones, en cambio, son un conjunto de viviendas planificadas y construidas por una empresa privada o pública, que cuentan con infraestructura, servicios básicos, áreas verdes, espacios públicos, vías, etc.

Más iluminación piden moradores de Los Vergeles. Foto: José Beltrán

Los retos del crecimiento de la ciudad

Los moradores de diferentes precooperativas, cooperativas, ciudadelas, urbanizaciones y demás formas de ordenamiento territorial dicen que hace falta mejorar ciertos servicios por parte del Municipio e impulsar proyectos para rectivar el ambiente de comunidad en los barrios.

En el noroeste, zona de asentamientos irregulares, por ejemplo, se pide que se aceleren los trámites de legalización para que llegue la obra pública: alcantarillado, agua potable e infraestructura comunitaria.

Cabildo notifica a 400 predios de Ciudad de Dios para iniciar el trámite de legalización

Doralma Bellolio, quien vive desde hace más de 20 años en Los Vergeles, norte de la ciudad, señala que -si bien gran parte de la zona está pavimentada-, es necesario mejorar las luminarias en la vía principal, tanto del sector de la Y como de Valle de los Geranios.

La mujer afirma que la llegada del nuevo centro comercial a la zona debería generar mejoras de la iluminación y la seguridad para los moradores y quienes visiten el establecimiento.

“Sería bueno tener un parque que una a todo el sector de Los Vergeles, Las Orquídeas y hasta Mucho Lote”, manifiesta.

Asimismo, en Casitas del Guasmo, moradores piden que se implementen proyectos sociales para rescatar el sentido de comunidad. “Quisiéramos que haya proyectos que hagan que los jóvenes o los adultos se interesen y los alejen de grupos delictivos o del consumo”, solicita una vecina. (I)