Vestidos de blanco, en su mayoría, y con una pequeña estampa con la imagen del Papa Francisco llegaron decenas de feligreses a la Catedral de Guayaquil para participar de la misa en sufragio por el alma del sumo pontífice que murió el pasado 21 de abril.

Según el protocolo enviado por la Conferencia Episcopal, esta eucaristía -que ahora se puede replicar en las diferentes parroquias de la ciudad- se la puede realizar luego de la misa de exequias desarrollada en Roma.

“Tanto amor derramó el papa sobre nuestro país y el mundo que es necesario elevar plegarias por su alma y por su eterno descanso”, dijo Gloria Macías, quien llegó junto a su esposo a la iglesia para participar de la misa.

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Antes de ello, la mujer colocó una firma de agradecimiento en un libro que se ubicó a la entrada al templo y que se prevé enviar al Vaticano en los próximos días.

En dos puntos de la Catedral también están exhibidas dos imágenes grandes del papa con la leyenda ‘Francisco’.

“Ese papa sonriente que vemos en las fotos es el que queremos recordar siempre, ese papa que hasta su último aliento nos bendijo y estuvo entregado a la iglesia. Tener este espacio para agradecer por la vida del Papa Francisco nos llena el corazón, el alma y el espíritu”, señaló Jasmani Minchala.

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El padre Omar Mateo, canciller de la Arquidiócesis de Guayaquil y párroco de San Miguel Arcángel, en Sauces 1, dijo que era importante resaltar la herencia espiritual de Francisco y su entrega y amor a la iglesia.

“Es el Papa de la Misericordia, es el Papa que ha convocado a dos jubileos a la Iglesia, el jubileo de la Misericordia en el año 2015 y el jubileo de la Esperanza que ahora estamos viviendo. Es el Papa del Sínodo, es el Papa cercano a todos por sus gestos, por su cariño y es el Papa que visitó el Ecuador”, resaltó.

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La eucaristía fue liderada por el obispo auxiliar de Guayaquil, el monseñor Gerardo Nieves.

Al menos 20 sacerdotes de parroquias de diferentes zonas de la ciudad participaron de la misa junto al coro Arquidiocesano.

“Vamos a pedir al Señor que lo reciba en su eterno descanso y que le premie por el tanto bien que le hizo a la Iglesia en estos 12 años”, manifestó Mariana Velepucha, guayaquileña que se movilizó desde el sector de la Trinitaria hasta la iglesia Catedral. (I)