Zeus, el perro que llegó en condición de abandono y luego se convirtió en el principal agente de resguardo del Palacio Municipal de Guayaquil, ya consiguió un hogar definitivo.

En el proceso de transición de la alcaldesa Cynthia Viteri al alcalde electo, Aquiles Álvarez, se buscó que Zeus quede en buenas manos luego de los dos años de labores de seguridad en el Palacio Municipal.

Zeus llegó en enero del 2021 como un perro callejero a la plaza de la Administración. Allí los uniformados del Cuerpo de Agentes Metropolitanos lo empezaron a alimentar, por lo que deambulaba en ese sitio.

Publicidad

Zeus, el nuevo miembro de la seguridad del Palacio Municipal de Guayaquil

Su vida dio un giro cuando un día se cruzó con la alcaldesa saliente y ella le mandó a hacer una casita con su nombre: Zeus, escogido así porque denota poder y fuerza ya que era parte de la brigada de seguridad del Municipio de Guayaquil.

Zeus conformó brigadas de seguridad y antiexplosivos, se preparó con la Infantería de Marina en Guayaquil. También era parte de los recorridos municipales y se convirtió en la mascota de muchos en el Municipio y el centro de la ciudad.

Zeus realizó un curso de adiestramiento con la Infantería de Marina en Guayaquil. Foto: Archivo.

Ahora en el Palacio Municipal y hasta en redes sociales de la alcaldesa, muchos funcionarios, colaboradores, transeúntes preguntan por él.

Publicidad

¿Cómo está Zeus? ¿Qué le ha pasado a Zeus?, preguntan las personas que hasta hace dos semanas aún lo veían acostado en su casa o paseando por la plaza de la Administración y ahora ya no ven ni su casita ni su cómoda que estaba en el pasaje Arosemena.

Guayaquil cuenta con Centro de Bienestar Animal: estos son los servicios y horarios de atención

Ahora Zeus ya tiene un nuevo hogar. Personal de la Dirección de Bienestar Animal del Municipio de Guayaquil le hizo un chequeo completo para entregarlo en adopción, así como a otros perritos que han pasado ese proceso en esa unidad.

Publicidad

Este Diario conoció que fue adoptado por una colaboradora municipal y que incluso ya vive en su nuevo hogar definitivo. Sus compañeros metropolitanos que lo acompañaban todos los días dicen que “se jubiló” de sus labores de seguridad y ahora disfruta de su nueva vida. (I)