Estados Unidos reclamó ayer una investigación por “crímenes de guerra” contra el régimen de Siria y su aliado ruso, tras un nuevo bombardeo que sufrió un hospital en Alepo, donde el ejército sirio avanza lentamente y la situación humanitaria es catastrófica.
Rusia a su vez amenazó con usar su derecho de veto para bloquear la propuesta francesa de resolución en la ONU para establecer un alto el fuego en Alepo y prohibir el vuelo de aviones de guerra sobre la atormentada ciudad siria.
“No veo de qué manera podríamos dejar que esta resolución sea aprobada”, dijo a la prensa el embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin.
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El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, acusó a Moscú y a Damasco de “aterrorizar” a los civiles y de bombardear deliberadamente los hospitales en Alepo, lo que constituyen “crímenes de guerra”. “Quienes cometen estos actos deben ser y serán responsables de sus acciones”, dijo Kerry a periodistas. (I)
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Muertos y 100 heridos dejó un ataque del régimen sirio a un hospital, la noche del pasado jueves.
