“Hemos estado jueves, viernes y sábado (20, 21 y 22 de agosto) clausurando más de 30 locales que están generando caos porque dan cabida a comerciantes informales, a personas que hacen mal uso del espacio y la vía pública”, puntualizó Luis Ávila, de Justicia y Vigilancia del Municipio de Guayaquil.

El fin de semana funcionarios municipales y policías recorrieron varios sectores de la urbe. Entre jueves y viernes se clausuraron más de 30 locales, y el sábado fueron un total de 16 tiendas (vendían bebidas alcohólicas sin autorización) y licoreras que irrespetaron el horario del toque de queda.

El viernes también hubo bares que atendían al público, pese a que el COE cantonal no ha autorizado su reapertura y muchos de ellos disfrazan su fachada con venta de comida, pero luego, puertas adentro, expenden licor.

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“El jueves clausuramos 23 establecimientos, entre los cuales hubo 12 hoteles con rótulos formales y 11 informales, que utilizaban casas para ingresar a personas que dan mal uso a la vía pública”, agregó Ávila, quien añadió que el viernes hubo operativos en la av. Barcelona, av. de las Américas. Se vio a establecimientos que expendían bebidas alcohólicas pese al toque de queda.

El funcionario reveló que también han encontrado casas que irrespetan la ordenanza realizando fiestas. En Samanes 7 se colocó un sello simbólico en la puerta y una familia fue citada a la comisaría para el pago de la multa de $400. (I)