Los tres años de renovación del Sistema General de Preferencias (SGP) de Estados Unidos (EE. UU.) están por vencer. En marzo de 2018, el exministro de Comercio Pablo Campana informaba que la renovación estará vigente hasta el 31 de diciembre de este año.

Según la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), es un mecanismo unilateral a través del cual, EE. UU., otorga condiciones de acceso preferencial a productos de unos 180 países.

El gremio indicó que bajo ese esquema, Ecuador exporta unos $ 400 millones anuales con una variedad de productos, como flores, frutas tropicales, vegetales y frutas en conserva, productos de la construcción y otros.

Publicidad

El sector exportador, según Fedexpor, se ahorra anualmente unos $ 45 millones en aranceles. Con la inclusión de las rosas, desde noviembre, llegaría a unos $ 70 millones.

Según un estudio de gremios empresariales, en caso de no ser renovado inmediatamente, el país pierde tratamiento preferencial para 279 productos, que deberán pagar arancel para ingresar a ese mercado.

El viceministro de Comercio, Daniel Legarda, dijo que ya hay un proyecto en el Congreso de EE. UU., para la renovación temporal, de seis meses, mientras se discute una más amplia con algunas reformas que ponen más condiciones para los países beneficiarios.

Publicidad

Legarda dijo que esto sería aprobado antes de que este cuerpo colegiado termine su periodo en enero, pero podría tomar uno o dos meses más.

Earl Blumenauer, miembro de la Cámara de Representantes, envió el 7 de diciembre un proyecto de ley que promueve renovar las preferencias hasta el 31 de junio de 2021.

Publicidad

Para la embajadora de Ecuador en Estados Unidos, Ivonne Baki, el SGP no es un tema problemático para ninguno de los partidos de EE. UU., “la demora ocurre sobre todo porque debe realizarse a través de un acto legislativo y normalmente el Congreso está ocupado a finales de cada año en buscar aprobar el presupuesto del siguiente año u otras medidas...”, dijo.

Baki agregó que el pasado 24 de septiembre, el senador Chuck Grassley presentó un proyecto de ley para renovar el esquema por 16 meses.

Sostuvo que ingresar un nuevo producto es largo y complicado. El proceso para la rosa duró siete años ya que hasta 2013 podían ingresar gracias al ATPDEA que finalizó.

Por ello, el Gobierno considera que la manera más directa y amplia de generar ventajas para los productos locales es un acuerdo comercial. (I)

Publicidad