Al llegar las lluvias en varias localidades de la Costa es habitual que con estas aparezcan insectos que generan incomodidad en la población como son los mosquitos y los grillos. Sin embargo, sobre estos últimos se ha identificado una reducción de su presencia en contraste con años anteriores en varios sectores de la ciudad.

Si bien durante varios días luego de las primeras lluvias comenzaron a aparecer en algunos hogares los grillos, el biólogo Jaime Buestán, especialista en el estudio de insectos, explica que en los últimos años la ubicación de estos animales se ha perfilado hacia la periferia de la ciudad y ya no el centro.

"Antes Guayaquil estaba rodeado de cerritos, lo que era las estribaciones bajas de la cordillera Chongón-Colonche y eso estaba cerca... Esos cerros son apropiados para que ellos se reproduzcan, pero ahora ya esos cerros no existen, todo está poblado, no hay los lugares de cría habituales que teníamos años atrás, entonces por eso deben estar por otros lados y talvez eso puede haber influenciado", explicó el especialista.

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Otro de los factores que podría afectar para su relativa ausencia es el cambio climático que ha modificado las temperaturas y la humedad, sin embargo, Buestán señala que esos indicadores se han mantenido por lo que no habría razón para un cambio en el comportamiento de estos animales.

Sobre el panorama inmediato señala que es improbable que se dé una aparición masiva en febrero y mucho menos en marzo, sin embargo, expresa que podría llegar a darse en este mes que recién inicia y si hubo un retraso desde el año pasado en la puesta de huevos.

"Ellos ya están adaptados a un ciclo evolutivo de un año de duración, porque ellos en esta época lo que hacen es dejar puesto los huevos en los lugares de cría y salir atraídos por la luz pues ya han cumplido su ciclo evolutivo, ellos prácticamente salen a morir", refirió. (I)