Mientras se construía Riocentro Norte en Guayaquil, donde ya funcionaba Mi Comisariato, una especie de túnel protegía el paso de los clientes que iban a hacer sus compras. Eso fue en 2010. La atención nunca paró, aprovechando cada espacio y oportunidad, los negocios fueron creciendo cada vez más y sumando marcas y franquicias cuando Johnny Czarninski Baier asumió las riendas de la empresa que empezó su padre, Alfredo, en 1937.