Arreglos florales de rosas blancas adornaban el Cementerio Judío, que se encuentra en el Parque de la Paz.
En ese lugar descansan los restos de Johnny Czarninski. Allí también se encuentran las tumbas de sus padres, el judío-polaco Alfredo Czarninski y Ruth Baier.
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Johnny Czarninski fue director ejecutivo de Corporación El Rosado y uno de los empresarios más destacados del Ecuador.
Su esposa, Nilly Shefi de Czarninski, y sus hijos, Taly, Yael y Gad, así como sus nietos, le dieron el último adiós al esposo, padre y abuelo.
“Estoy aquí porque yo trabajé en sus empresas. Estuve muchos años y este es mi agradecimiento”, dijo una de las extrabajadoras que no logró contener las lágrimas. Ella era consolada por su esposo, quien la acompañó a ese camposanto.
La ceremonia se basó en la tradición funeraria judía. Se inició cerca de las 17:10 con el arribo de la carroza fúnebre. Los familiares seguían las instrucciones del rabino, considerado un jefe espiritual, quien vestía de negro y blanco con sombrero.
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Así llegó la familia Czarninski a Ecuador, la que creó un imperio empresarial
Hijos y nietos cargaron el ataúd simple de madera, conforme a la tradición. El rabino realizó una lectura y recitación de oraciones. Luego, uno de los hijos cortó un poco de cabello a ciertos familiares. Esto, de acuerdo a algunas tradiciones judías, se realiza como un rasgado de la prenda que es una señal externa de duelo y aceptación de la muerte.
Finalmente, la familia y amigos cercanos arrojaron tierra sobre el ataúd con una pala en el Cementerio Judío cerca de las 17:30. La ceremonia fue corta y en silencio.
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¿Quién era Johnny Czarninski, presidente de Corporación El Rosado?
Czarninski tenía 76 años y le diagnosticaron cáncer. Fue el hijo del migrante judío-polaco Alfredo Czarninski, quien llegó en el barco Reina del Pacífico al puerto de La Libertad y se trasladó a Guayaquil en 1936. Después, en 1937 creó el Salón El Rosado.
Czarninski fue testigo de cómo su padre salió adelante en la ciudad que lo acogió y formó una familia junto con Ruth Baier, quien fue su madre. Su llegada fue marcada por la persecución nazi. (I)
