Una nueva complicación en la salud del papa Francisco llevó al sumo pontífice a la sala de cirugías del hospital Gemelli de Roma. En esta ocasión fue operado de una hernia incisional abdominal, por lo que se someterá a una laparotomía de urgencia, intervención consistente en abrir el abdomen.

Tres horas duró la cirugía, que acabó “sin complicaciones”, según la Santa Sede.

Los síntomas del papa Francisco, de 86 años, eran “síndromes suboclusivos recurrentes, dolorosos y que empeoran”, reveló el equipo médico del Vaticano. Por eso, tras su audiencia semanal en la plaza de San Pedro del Vaticano, el pontífice fue llevado al centro médico, el mismo en el que se realizó exámenes la semana pasada.

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“Al comienzo de la tarde, se someterá a una operación quirúrgica de laparotomía y de cirugía plástica de la pared abdominal con prótesis, bajo anestesia general”, explicó un comunicado de la Santa Sede.

El papa Francisco retoma sus actividades tras reposo debido a una fiebre

El secretario de Estado y número dos de la Santa Sede, el cardenal Pietro Parolin, dijo que esta operación no implicará “ninguna vacancia”, “ni un remplazo temporal del papa en el ejercicio de sus funciones”. Los médicos apuntan a que necesitará varios días de hospitalización, pero el cardenal aseguró que tras la cirugía, Francisco retomará el ejercicio de su ministerio “aunque sea desde una cama de hospital”.

Según el médico Luigi Boni, director de cirugía general del Policlínico de Milán, esta hernia es consecuencia de la operación de divertículos que se le practicó al papa hace casi dos años. El experto indicó que en la intervención de hoy se volverá a abrir en el punto donde se hizo la incisión anterior y se reforzará la pared abdominal donde se había formado la hernia incisional, para lo cual se usará una prótesis, una malla sintética.

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No es la primera vez que el papa Francisco sufre una recaída en su salud. En abril de este año, el pontífice argentino estuvo internado por tres días en el hospital Gemelli por problemas respiratorios.

En julio de 2021 fue sometido a una cirugía de estenosis diverticular que involucró una hemicolectomía izquierda, con anestesia general.

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Además, el sumo pontífice se desplaza en silla de ruedas debido a una dolencia en la rodilla y una ciática crónica, por la que tuvo que renunciar en varias ocasiones a ceremonias oficiales y posponer viajes. (I)