“Por beneficio del pueblo y para que no se me interponga un abandono del cargo, solicité todo lo necesario para cumplir esta delegación con el mayor de los agrados”, afirmó la vicepresidenta Verónica Abad al anunciar que sí cumplirá con la tarea asignada por el presidente Daniel Noboa de ir a Israel para colaborar por la paz, sin especificar cuándo se desplazará hasta Tel Aviv.

Desde el hall de la Vicepresidencia de la República, Abad confirmó su futuro traslado luego de denunciar una serie de hechos que asegura ha vivido desde la campaña y ahora en funciones, que implican no haber sido invitada a eventos oficiales, objeto de calumnias y de una campaña de supuesta desacreditación de su imagen.

Sobre su única función, la vicepresidenta dijo que ya ha estado trabajando en ello. Aunque cuestionó que ni Estados Unidos ha podido mediar en el conflicto entre Israel, Hamás y Palestina, y que el reto para Ecuador es aún más grande.

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Sin embargo, dijo que ve a esta misión como una plataforma para dejar el nombre del país en alto y que lo tomará como una oportunidad para sacar provecho para Ecuador de la cercanía que existirá con Israel.

Abad buscó acercamiento con otros cuerpos diplomáticos de países como EE. UU., China y Rusia, que celebraron la decisión de Noboa, y adelantó que las conversaciones se darán en esta semana.

Por su parte, del lado del Gobierno, el secretario de Comunicación, Roberto Izurieta, dijo que el mandatario ya está al corriente de lo que manifestó Abad este martes y que ha dispuesto que se reúna con la canciller Gabriela Sommerfeld para coordinar todas las acciones necesarias para el cumplimiento de su misión en Israel como colaboradora por la paz.

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“Luego de dar un resumen sobre sus declaraciones al presidente Daniel Noboa, una vez terminada la reunión del equipo de seguridad que presidió toda la mañana, me permito informar que el presidente ha dispuesto a la señora canciller que se reúna con la vicepresidenta, con el objetivo de coordinar todas las acciones necesarias para el cumplimiento de tan alta misión”, indicó Izurieta.

Con todas sus declaraciones, la vicepresidenta confirmó que existe un alejamiento con el mandatario y contó que no fue invitada en varias ocasiones a eventos oficiales.

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“Se ha dicho que rechacé ir a Olón, al almuerzo en Carondelet o la toma oficial de la foto, pero no fui invitada ni yo ni mi equipo”, reveló, al igual que ha recibido pedidos de parte del equipo del presidente Daniel Noboa de no hablar con los medios de comunicación, y dijo que se está confirmando que se ha convertido en una figura incómoda y ya hasta se está hablando de buscar su destitución.

Asimismo, rechazó que se hable de traición y de tener una agenda propia. (I)