Quevedo, LOS RÍOS

Segundo Pilaguano, de 65 años, conducía un camión por el anillo vial de Quevedo cuando el vehículo tuvo un desperfecto mecánico, se le rompió un rulimán de la llanta izquierda.

Fue un jueves a las 22:00, iba solo y tras lo ocurrido pensó que sería víctima de los asaltantes que rondan por el corredor vial.

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Con la suerte echada y resignado a lo que pudiera pasar, alcanzó a conducir varios metros hasta que en medio del camino se topó con la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) móvil que se encontraba cerca de los radares.

Los uniformados lo auxiliaron y permanecieron custodiándolo hasta la tarde del viernes cuando, luego de conseguir el repuesto del vehículo, pudo continuar su marcha.

“Yo transporto helados, pensé por un momento que me iban a asaltar, salí desde Pifo con destino a Guayaquil. Pasar por el anillo vial es una aventura, todo puede pasar debido a que siempre se han registrado asaltos a los conductores”, contó el chofer.

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El sitio donde encontró la UPC móvil desde el viernes 9 de agosto es una de las paradas seguras para los transportistas pesados que pernoctan de entre 40 y 60 minutos hasta que se agrupan y avanzan en caravana con custodia policial por todo el anillo vial hacia el cantón El Empalme, en la provincia de Guayas.

Álex Ayala, dirigente de los transportistas, indicó que hasta antes de aquello la zona de encuentro para los convoyes era la gasolinera Fon Fay, en la vía Quevedo-Buena Fe; sin embargo, debido a cuestiones de espacio y para mejor circulación, la cambiaron al inicio del anillo vial.

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“La salidas en caravanas son cada tres horas, a las 06:00, 09:00, 12:00, 15:00, 18:00, 21:00 y 03:00. Estamos analizando, según la afluencia de vehículos, hacerlo cada hora de ser posible”, informó Ayala y precisó que en los próximos días se colocará un contenedor que será adecuado para que puedan pernoctar tanto los policías como los transportistas.

Los transportes pesados se agrupan en el lado izquierdo del anillo vial para circular en caravana.

Ayala informó que, debido a las caravanas, al menos 600 metros del lado izquierdo del anillo vial desde el sentido de Buena Fe será de uso para los transportistas pesados y buses interprovinciales; para ello, con apoyo de la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE), han habilitado el carril de en medio del anillo vial por donde podrán circular los carros particulares.

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Renán Miller, comandante provincial de la Policía en Los Ríos, dijo que uno de los proyectos a futuro es construir un cuartel policial en el anillo vial, para ello esperan que se realice la donación de un área y, posteriormente, avanzar con su ejecución.

“El cuartel será un punto seguro donde los conductores puedan ducharse, descansar, la Policía estará permanentemente en una parada técnica; esperemos que se pueda realizar”, indicó el coronel.

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Sobre el proyecto, el gobernador Luis Martínez sostuvo que en días anteriores realizaron visitas a terrenos situados por el anillo vial, donde se podría construir el control integrado.

Terrenos situados en el recinto La Estrella, Juanita y La Virginia fueron recorridos por el gobernador, representantes de la Policía y de las Fuerzas Armadas.

“El objetivo es proporcionar un espacio seguro para la comunidad y los transportistas que circulan en la zona”, recalcó el representante del Ejecutivo.

Según la Policía, actualmente los asaltos y secuestros en el anillo vial se han reducido en un 90 %, esto debido a que, además de las UPC móviles que permanecen en esta vía, durante las 24 horas existen nueve patrulleros circulando en los tres tramos, más otros dos patrulleros de la Unidad de Contingencia Fronteriza de Quito que permanecen en Quevedo.

El policía indicó que varios tramos del anillo vial que antes permanecían a oscuras ya han sido iluminados por parte de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL) y además se está resolviendo la cobertura de internet, lo que permite que los transportistas puedan tener mejor comunicación.

Los vehículos particulares deben circular por la parte central del anillo vial durante aproximadamente 600 metros.

Édisson Ramírez, conductor de un bus de la cooperativa Occidental, describió el paso por el anillo vial como una zona de peligro constante.

“Desde las 21:00 hasta las 03:00 es el horario más riesgoso. Yo paso a esa hora en convoy, pero hay otras vías como la Ventanas donde también hay asaltos”, contó y no pudo evitar emocionarse al recordar que su familia siempre lo llama y ora por él cuando permanece laborando, ya que su vida está en riesgo.

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“Muchas veces se pasa solo el anillo vial, ahí le pido al Todopoderoso que me proteja y esperamos lo que venga, porque a veces no se ve ni a policías ni a militares. Mi familia me ha pedido que deje este trabajo”, señaló el transportista y afirmó que para él pasar en convoy ha reducido en un 10 % los asaltos.

Henry Prado, otro chofer que labora en un bus de transporte, indicó que los radares en el anillo vial obliga a los conductores a bajar la velocidad y esto es aprovechado por los asaltantes, quienes saben cuando los policías que patrullan no están en el sitio debido a que acuden también a asistir emergencias.

Sobre los radares, el dirigente Álex Ayala indicó que esperan hablar con el alcalde de Quevedo, Alexis Matute, para buscar la manera de que estos sean retirados debido a que su instalación favorece a la delincuencia.

Días atrás, el Ministerio de Gobierno hizo pública la lucha contra el terrorismo en Quevedo, directamente en la zona del anillo vial, donde, a pesar de los controles que los policías y militares realizan, se siguen reportando asaltos y secuestros.

Por medio de redes sociales se anunció una recompensa para quienes den información sobre grupos delictivos, como Los Lobos y Los Choneros, que operan en el anillo vial de Quevedo.

El plan de recompensas del Gobierno detalla que la identidad de quienes colaboren con información será protegida.

Las denuncias o informaciones pueden hacerlas llamando al 131 o enviar un correo electrónico a informa@recompensas131.org con datos que permitan la desarticulación de organizaciones criminales. (I)