Corporación El Rosado, es el resultado del esfuerzo y trabajo de la familia Czarninski, propietaria de distintos negocios como supermercados, centros comerciales, cines, restaurantes, jugueterías, tiendas de ropa, radio, entre otros, cuya principal cualidad es no haberse rendido ante los obstáculos.

Sus inicios se remontan a una época en la que se desarrollaba la II Guerra Mundial; la persecución nazi provocó la migración judía hacia diversos países, entre ellos Ecuador. El 25 de noviembre de 1936, Alfredo Czarninski, con 19 años de edad, llegó en el barco Reina del Pacífico al puerto de La Libertad, para trasladarse luego a Guayaquil, ciudad donde años más tarde nacería el Salón Rosado.

Amigos y clientes asiduos al Salón Rosado, el sitio de reunión favorito de la época.

“Después de una serie de eventos, gracias a un préstamo que hizo, mi padre compró las instalaciones de un salón fracasado. Él mismo tuvo que arreglar las viejas sillas y mesas de madera y las pintó del característico color rosado, al cual se debía el nombre del lugar”, rememora Johnny Czarninski sobre los orígenes de la compañía en julio de 1937.

Primera caja registradora del Salón Rosado.

“La principal característica del Salón Rosado era la atención personalizada del joven Alfredo, quien conversaba y se interesaba por cada uno de sus clientes, no importaba si era una personalidad reconocida de la ciudad o un intelectual de avanzada sin dinero”, agrega Czarninski, guayaquileño, cuyos orígenes provienen de Alemania.

Al Salón Rosado también lo visitaban soldados y marinos norteamericanos que venían a Guayaquil desde la base de Salinas. Fue entonces, que como buen autodidacta Alfredo Czarninski aprendió inglés. Entre el público también se encontraban propietarios de prensa escrita, como Ismael Pérez Castro, dueño de diario El Universo, con quien don Alfredo forjo una estrecha amistad que perduró con el paso de los años.

Más adelante, el Salón Rosado comenzó a importar artículos de lujo de varias marcas, entre ellas Perugina, un fabricante de cerámica italiana, bombones, entre otros, que llegaron a ser rápidamente los más apetecidos del mercado. Tiempo después la familia Czarninski adquirió un terreno diagonal al Salón Rosado en 9 de Octubre 729 y Boyacá, construyó un edificio, arrendó los cuatro pisos para pagar la hipoteca y en la planta baja abrió Importadora El Rosado. Luego, Alfredo Czarninski, descubrió, gracias a una revista que llegó de Estados Unidos a sus manos, los supermercados con su sistema de autoservicio lo cual llamó mucho su atención y lo replicó localmente.

Johnny Czarninski relata una emocionante anécdota relacionada con el diario. “El 29 de Octubre de 1956, cuando yo recién había cumplido nueve años, se desató la Guerra del Sinaí entre Israel y Egipto. En esa época no había televisión, no se podía escuchar la radio del extranjero e inclusive las noticias internacionales recién las podíamos leer al día siguiente ya sea en el diario El Telégrafo o en el diario El Universo, las noticias publicadas tenían ya unas 48 horas de haber sucedido.

Para mis padres la noticia de una guerra en la que participaba el pequeño, recién independizado y muy débil militarmente Estado de Israel era muy preocupante, pero me acuerdo como si fuera hoy, que gracias a la gran amistad de mi padre con la familia Perez Castro, ellos nos permitían entrar en las salas de redacción de El Universo.

“Mi padre cambió la forma de atender al público que visitaba los locales porque instauró la modalidad de un supermarket”, afirma Johnny Czarninski mientras recorre el museo que guarda la historia de su familia.

Nosotros vivíamos en 9 de Octubre y Boyacá, a una cuadra del diario. Por lo tanto, varias veces al día, durante la noche y madrugada, mi padre y yo íbamos a El Universo, subíamos al segundo piso, donde llegaban las noticias y estaban los redactores preparando la siguiente edición del periódico. En ese gran salón nos enterábamos de las noticias de la guerra que iban llegando. En aquel tiempo existía un equipo parecido al fax que me impresionó muchísimo, primero se veían solo rayas pero poco a poco aparecían imágenes, eran las fotos internacionales que llegaban para ser publicadas al otro día”.

Surgen otros locales

En 1965 un supermercado de Urdesa quebró y fue adquirido por Czarninski, quien además compró un terreno para construir un tercer supermercado en el Barrio del Centenario, en las calles Rosendo Avilés y Boyacá.

En 1975 arrendó un pequeño local de la familia Yerovi en Roca y Rocafuerte y le puso el nombre de Mi Comisariato. Al inicio se estableció como negocio para darle servicio a grandes empresas cuyos empleados recibían una tarjeta de afiliación que en un momento dado se volvió un símbolo de status y que hoy portan la mayoría de los ecuatorianos.

Riocentro Entre Ríos es uno de los centros comerciales más visitados.

En la actualidad, Corporación El Rosado cuenta con más de 300 locales a nivel nacional y está dirigida por Johnny Czarninski y sus hijos Gad y Yael. Las marcas siguen creciendo y hoy en el radar de los consumidores se encuentran entre otras: Mi Comisariato, Hipermarket, Mi Juguetería, Ferrisariato, Rio Store, Mini, Mi Panadería, Baby Center, Metrópolis, Riocentro, El Paseo Shopping, Supercines, Imax, Radio Disney, Carl´s Jr., Chili´s, Red Lobster, IHOP, Super Easy y Tuti. Todas ellas son solo el inicio de lo que aspira Czarninski para el futuro, continuar expandiéndose, cumpliendo aquella filosofía de que el esfuerzo constante siempre tendrá su recompensa.

Una vista del Imax en el centro comercial El Dorado.

Ficha empresarial

  • Fecha de creación: Julio de 1937
  • Fundador: Alfredo Czarninski.
  • Número de colaboradores: Más de 10.000.
  • Certificaciones: Hipermarket El Dorado y el Paseo Shopping tienen certificaciones LEED.