Una rueda de prensa áspera, corta, es la que brindó el técnico de El Nacional, Marcelo Zuleta, después de la caída de su equipo ante Delfín, por 0-1, que significó la tercera consecutiva, en igual número de partidos, en la presente LigaPro.
En un minuto y 30 segundos el argentino respondió dos preguntas, la noche de este domingo, y en ese tiempo reiteró que necesitan "refuerzos" para salir del desastroso inicio de torneo, algo que solo es la continuidad del 2018, año en que el rojo terminó en zona de descenso.
Se salvó jugar en la serie B, por decisión de la LigaPro que requería completar el cupo de 16 equipos (antes eran 12), pero en esta temporada en castigo será tratado como equipo de la B, ya que por derechos de televisión recibirá apenas un poco más de $ 500.000, se conoció.
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"El esfuerzo del cuerpo técnico y de los jugadores es grande, pero muchas veces pasa como en este partido que en la primera pelota que va al arco nos convierten", declaró Zuleta, en alusión al gol de Roberto Ordóñez (6m) que sentenció el 0-1.
"Estamos preocupados. La idea era mantener el cero en nuestro arco. Luego generamos opciones, pero no pudimos anotar", acotó el adiestrador, a quien desde las gradas los hinchas pedían su salida, al igual que exigían que se vaya la dirigencia liderada por Tito Manjarrez.
El estratega y el presidente Manjarrez son los principales responsables del armaje del equipo, que en la cancha no da pie con bola. Los fichajes, en su mayoría, llegaron de la serie B.
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El Nacional es último en el torneo con cero puntos y su valla es la más batida con 9 goles en contra. Ha marcado 3 tantos, todos convertidos por Jordy Caicedo, quien llegó desde la Universidad Católica.
En la próxima fecha, el cuadro militar visitará a Mushuc Runa y lo más probable, si no hay cambios, es que el calvario militar continúe.
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En este contexto, trascendió que la directiva analiza la posibilidad de renunciar. La noche de este lunes puede haber novedades.
