Un gol de Iago Aspas en el último minuto culminó el acto de rebeldía del Celta de Vigo en Balaídos para empatar ante el FC Barcelona (3-3) un partido que perdía por tres goles en el descanso, tras una primera parte de enorme pegada del conjunto catalán, que acabó acusando las bajas por lesión de Ansu Fati, Eric García y Nico González