Robinho, como Dani Alves, fue acusado de violación en 2013. Compatriotas y jugadores de fútbol, ambos, pero con destinos bien distintos. Y es que, mientras el exjugador del FC Barcelona lleva ya más de tres meses encarcelado, el exdelantero del AC Milan no ha pasado ni un solo día en prisión, publica diario Mundo Deportivo.