El Seguro por Incapacidad del Seguro Social (SSDI, por sus siglas en inglés) ofrece pagos mensuales a personas que tienen alguna incapacidad que no les permite trabajar.

De acuerdo a la Administración del Seguro Social (SSA), los beneficios pueden incluir un pago mensual y Medicare. La cantidad del dinero que reciba el beneficiario está basado en el historial de trabajo antes de la incapacidad.

Se puede cumplir con los requisitos y aun así recibir una respuesta negativa

Si alguien hace la solicitud del SSDI, es posible que reciba una respuesta negativa, aun si se cumple con todos los requisitos. Esto también ocurre cuando la SSA suspende los beneficios luego de una revisión médica.

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Estas situaciones suelen ser muy comunes, por ende, el sistema permite que el beneficiario pueda apelar para que se haga una revisión del caso.

Foto: Captura de imagen de la SSA.

Para ello, la persona no deberá empezar desde cero o pagar por el trámite. Con la apelación, un nuevo equipo revisará la documentación, escuchará al solicitante y, de ser necesario, revisará la evidencia médica que no se tomó en cuenta en la evaluación inicial.

Según Tododisca debe tomar en cuenta que hay una fecha límite para apelar: 60 días calendario desde el momento en el que se recibe la notificación de la decisión por parte de la SSA.

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¿Cómo apelar a las decisiones del Seguro Social?

La apelación del Seguro Social se divide en cuatro etapas, si no se logra una resolución favorable en una de ellas, se pasa a la siguiente:

  1. Reconsideración: el caso es revisado completamente por un equipo distinto al que tomó la decisión inicial. Puede incluirse nueva información médica.
  2. Audiencia con un juez administrativo: se puede pedir la audiencia en persona o por videoconferencia. En ella se pueden presentar testigos e incluso, estar acompañado de un abogado.
  3. Revisión por el Consejo de Apelaciones: se revisa la aplicación de las normas del Seguro Social por parte del juez anterior.
  4. Demanda ante un tribunal federal: en caso de que la junta también falle en contra, el caso puede pasar a los tribunales.

Si se agotan estos cuatro recursos sin un resultado positivo, el caso se cierra. Pero la persona puede volver a pedir el SSDI luego, especialmente si hay un cambio importante en la condición médica o se tienen nuevos informes que respalden el diagnóstico.

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(I)

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