¡Obvio, la veda!, expuso Verónica García luego de tomar asiento en un cangrejal de la calle Los Ríos, centro de Guayaquil, en compañía de su hermana Joselyn, primas y sobrinas. Las cinco mujeres provenían del sector Los Tulipanes, sur, y se apuraron en degustar cangrejos antes de que la veda las prive por un mes del apreciado producto del mar.