Más de 500 nuevos policías fueron distribuidos en Guayaquil: familias les compraron colchones y hasta chalecos antibalas

Juan López y su esposa Julieta llegaron desde Santo Domingo de los Tsáchilas para ver como su primer hijo, Andrés, de 19 años, era asignado a un área de Guayaquil como parte del nuevo grupo de uniformados que se unen a las labores de seguridad.

Andrés fue parte de los 565 policías que este jueves 15 de junio se unieron a la Comandancia de Policía Nacional Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón). Esto como parte del programa del Gobierno en reforzar la seguridad en las ciudades más conflictivas del país, luego del estado de excepción que finalizó hace unas semanas.

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Ellos formaron en el Cuartel Modelo, en el norte de la urbe. Hasta ese sitio llegaron cientos de familiares a despedirlos, unos desde varias zonas de Guayaquil, así como de otras provincias como Los Ríos, Azuay, El Oro y de Santo Domingo de los Tsáchilas como el caso de Andrés y su familia.

Su padre comentó que el colchón les costó $ 30 y el chaleco antibalas $ 330, además de otros enseres. “Nos dijeron que traigamos el colchón que les dieron en la instrucción policial, pero estaba en Santo Domingo y hasta traerlo hasta acá preferimos comprar uno nuevo”, explicó.

Así como estas familias, otras también se pusieron “a correr” con la provisión de alguna cama o colchón para los uniformados. “Nos pidieron cama, yo vivo en Salitre, mi papi ya se fue a traerme el colchón porque aún no tenemos dónde dormir”, comentó otro de los uniformados.

Otro más dijo que como viven en Quevedo, su familia prefirió comprarle un colchón acá en Guayaquil y estaban comprando otros enseres.

El general William Villarroel, comandante de la Zona 8, explicó que en los próximos días se sumarán otros uniformados ya de mayor rango para complementar unidades policiales de investigación.

“Han recibido capacitación, entrenamiento. Este es parte del programa de refuerzo. También estamos trabajando para la provisión de chalecos, municiones”, comentó el general.

Dentro de este grupo hay al menos 100 uniformados que estarán alojados en aulas de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG) con un convenio entre el Municipio para proveerles varios servicios y que puedan cumplir sus periodos de preparación para dar servicio a la ciudad. Estos incluyen alojamiento con aire acondicionado, dotación de camas, cocinas, esto con convenio de la empresa privada.

Andrés Sandoval, director de la Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil (CSCG), explicó que se están procurando todos los detalles para que los uniformados tengan sus necesidades básicas para estar tranquilos y cómodos, y que esto será un notable refuerzo para la seguridad de la urbe. (I)