La avícola JG pasó de tener más de una decena de pollos exhibidos sobre un aparato de refrigeración a menos de 10 unidades, pero solo a temperatura ambiente. En ese local, ubicado en las calles José Mascote y Pedro Pablo Gómez, los apagones provocaron que una de las cámaras de refrigeración y de exhibición de productos se dañe y, por ello, se tenga que reconfigurar la forma de vender los cárnicos.