“Sé que muchos se preguntan: ¿qué hace esta niña aquí?, algunos no me conocen. Soy Mar Rendón”. Con estas palabras se presentó días atrás la cantante ecuatoriana al ganar el premio Heat como Mejor artista rock, un galardón en el que estuvo frente a artistas de trayectoria como Juanes, Molotov, Maná, Jorge Drexler, Aterciopelados y Belanova. Sí, era la más joven de los competidores en esta sección -como lo dijo posteriormente- y sin embargo también era la que tenía un fandom o grupo de seguidores más comprometidos con su propuesta.
Este premio entregado en Punta Cana (República Dominicana) se consigue a través del voto del público en digital y ‘Los marcianos (es)’, como se denominan los fanáticos de la guayaquileña le han demostrado su apoyo desde su intervención en el reality La Academia, del que resultara finalista. “Yo sentí que más que un logro mío, sentí que era un logro para la música en Ecuador. Siento que yo he estado trabajando pasito a pasito por mi carrera y veo como cada vez hay más apoyo para los artistas emergentes. Cuando me anunciaron que había ganado frente a los otros artistas, para mí fue emocionante porque es el sentimiento de saber que hay un público que apuesta por lo nuevo y me da la oportunidad de ser escuchada y tener reconocimientos”, cuenta.
Para esta entrevista y sesión fotográfica, Mar nos recibe en casa, un espacio lleno de color y diversidad como su música. La cantautora de 21 años que el público sigue en redes sociales, aparece en videos musicales y da entrevistas a medios locales e internacionales, es la misma joven sencilla que se toma fotos o envía videos de saludos por petición de su comunidad digital o que sin ningún ‘divismo’ exalta el proyecto artístico de sus colegas y compatriotas. Es ella, la principal embajadora y creyente en sus creaciones.
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Ganaste en el género que te recomendaron no seguir, al que no le apuestan otros y que aseguran no es ‘rock’...
Yo creo que es una señal que cuando haces lo que te apasiona, le pones de todo tu empeño para que salga lo mejor posible y a mí desde siempre me ha apasionado el rock, fue con lo que crecí por mi papá, por Disney Channel, por las artistas con las que yo empecé ese camino que fueron Demi Lovato, Miley Cyrus, Selena Gómez, que todas empezaron haciendo pop rock, entonces sí siento que es algo que me gustaba tanto que quería que salga cada detalle a la perfección. Eso es parte de la magia, es lo que disfruto hacer y sé que ahora hay mucha gente que le gusta lo que estoy haciendo porque es una propuesta distinta a lo que ya hay actualmente en el mercado, sobre todo en la música ecuatoriana.
Música nueva
Si fuera yo es el sencillo que interpreta Mar y que es parte del álbum La Nueva cepa, producido por el músico puertorriqueño Master Chris, un disco que la acerca a otras audiencias y que le da mayor exposición internacional. En esta producción comparte créditos con artistas de Perú, República Dominicana, Colombia y Ecuador (también tiene canciones de Dayanara y Andreína Bravo).
Después de la promoción de este sencillo (en Spotify registra alrededor de 567,853 reproducciones hasta el cierre de esta edición), se prepara para nuevos lanzamientos.
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“Se vienen algunos temas pop rock, yo veía el debate de quiénes dicen que no canto rock. Y yo: claro que hago pop rock, en realidad siento que es un género que tengo marcadísimo y se puede ver en canciones como Te Arde, Las chicas se cuentan todo (ft. Legna Hernández), Solo ruido y por esa misma línea voy a seguir para mis siguientes temas. Creo que tienen todas mis influencias musicales y es un género en el que siento que mi voz destaca pero también estaré haciendo baladas tristes por ahí”, añade.
México, el país de las oportunidades
Es su segundo hogar, el país donde logró conquistar los corazones de un público e industria en extremo exigente y con un alto sentido del valor y respaldo a su talento local. En México, Mar se ha radicado para fortalecer su carrera a nivel internacional y donde además empezó su vida de forma independiente.
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“Siempre estoy yendo y viniendo pero cada vez que piso México siento que se me abren nuevas puertas, por eso es un país con el que estoy muy agradecida. No solo con la industria, si no también con la gente, con todos los marcianos que me apoyan, que hace poco fueron a mi concierto en ciudad de México. Es un gran mercado para el tipo de música que yo hago, por eso no quiero sacar el pie de ahí”, revela Mar, quien aspira -confiesa- amplicar sus horizontes profesionales con la actuación en este país.
Conocer nuevos artistas y colaborar con ellos se ha convertido en una de las mejores experiencias mientras está en México. “Poder componer, crear nuevas canciones, encerrarme en mi cuarto a escribir porque siento que tengo más silencio o privacidad porque vivo sola, también hago streams en Twich, pero no dejo de trabajar. Siento que me desespero si un día me paso de vaga, que también tengo mis días y me quedo en mi casa jugando Nintendo”, dice la también aficionada a videojuegos como Pokemon, Zelda, Tears of the Kingdom (Zelda) o Animal Crossing.
Mar reconoce que México y Ecuador son dos países en los que tiene una fuerte presencia de seguidores y escuchas y esa meta, admite, quiere replicarla en Estados Unidos. “Me gustaría pasar un tiempo en Miami, siento que ahí hay un mercado fuerte de latinos, de música latina; y Colombia también es un país que me interesa bastante por todo el talento que hay allá de autores y compositores”, dice.
La joven compositora revela además que entre sus más locos sueños de colaboración con otros artistas, coincidir con la barranquillera Shakira es el primero de su lista. “Con Shakira sería woow, probablemente no pase pero solo poderla conocer sería una experiencia increíble, me han comparado con ella por mi timbre de voz, siento que nos llevaríamos muy bien”, acota.
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Legalmente rubia, su primer estelar en teatro
De la mano de Danzas Jazz, con José Miguel Salem, Mar asume un reto: meterse en la piel de la icónica Elle Woods en la obra musical Legalmente rubia, una coproducción con el teatro Sánchez Aguilar.
“Empezamos los ensayos pero el casting se hizo hace unas semanas. Hice la audición como cualquier persona, pero fui con la mente de ganarme ese papel. Es más, traduje yo misma una versión de una de las canciones que más me gusta del musical, hice una versión improvisada en español para que puedan escuchar mi dicción, mi interpretación actoral. Siento que me preparé muchísimo”, cuenta sobre este personaje. Desde entonces, dice, revisa dos veces al día el musical para analizar el personaje, sus entradas y movimientos en la obra.
La puesta en escena, basada en la novela de Amanda Brown y la Metro-Goldwyn-Mayer motion picture, se estrenará el 13 de septiembre con la producción ejecutiva de Patricio López, música y letra de Laurence O´Keefe y Nell Benjamín.
El elenco también lo integran Juan Gálvez, Nicole Rubira, Carolina Aguirre y Ludovico Maquiavelo.Mar señala que con su personaje tienen cualidades y características en común. “Nuestro color favorito es el rosado, somos muy ambiciosa, eso es más personal, la relación de Elle con sus amigas, cuando se propone una meta hace hasta lo imposible para conseguirla, sus ganas de salir adelante y también que es muy subestimanda”, menciona.
¿Cuándo y por quiénes te has sentido subestimada?
Me he sentido muy subestimada por gente mayor a mí, ya sea en la industria musical o en general, pero algo que tengo en común con Elle es que siempre les demuestro que soy más de lo que piensan. Cuando empecé con mi carrera me ha pasado, o cuando tengo que ir a eventos a cantar y no soy un artista internacional, soy de las más pequeñas. A veces, siento yo, que de repente se minimiza mucho a los talentos emergentes. Yo siento que mi arma secreta siempre será que me he preparado, que estoy preparada y que cuando me subestiman puedo probarles lo contrario.
Por mérito propio
Las puertas que ha tocado, admite Mar, no siempre han estado abiertas para ella. Aunque los ‘haters’ en redes aseguran que su camino ha sido más llevadero por ‘contactos’, la intérprete de Antes de que me vaya recalca que el camino se lo ha labrado a pulso.
“Por más que mis papás sean publicistas, han trabajado en comerciales y por lo tanto conocen a gente del medio, yo no he tenido el nivel de contactos que la gente supone y creo que es una mentira que se inició desde que yo estaba en Ecuador tiene talento. Sí, he sido muy afortunada por cómo se me han dado las cosas y la familia que tengo, por el nivel de apoyo y que confíen en mi sueño. Yo empecé cantando desde pequeña con mi banda, presentándome en una feria de emprendimientos”, narra.
En su camino, relata, ha conocido personas hermosas. “Pamela Cortés fue mi vocal coach un tiempo, Gianpiero y Daniel Beta, con los que hice mi primera canción, luego Sergio Vivar y todo el equipo de La Real Sociedad, siento que esos son verdaderamente los contactos, que dicen que tengo pero que yo fui haciendo con mi esfuerzo”, enfatiza.
Mar, quien acostumbraba a hacer cosplay y fue integrante de un grupo de baile de k-pop, no ha mantenido el contacto con sus excompañeros de La Academia. “He tenido pocas interacciones, con Nelson estuve hace poco en el programa Venga la alegría, pero con los demás, no. Cada uno siguió su camino. Siempre les deseo bien, porque todo lo que deseas se regresa”, comparte. La ecuatoriana se irá de gira por México con los integrantes de las cinco primeras generaciones de La Academia. Ella será la artista invitada en septiembre, después del musical.
¿A qué no renunciarías por amor o por amistad?
Mi carrera siempre es prioridad, siempre lo ha sido desde que he sido chiquita, y la verdad no pierdo el enfoque.
En la música y la actuación, que ahora inicias profesionalmente, ¿Cuáles son tus más grandes anhelos?
Tener un hit, que la gente y todo el mundo me conozca por al menos una canción, y también, en lo actoral, lograr un protagónico que sea bastante parecido a lo que soy, pero creo que Elle Woods, es justamente eso. Y si puedo decir otro, poder estar en más obras musicales y también estar en teatro musical en México.
Quizás, ¿te imaginas haciendo el doblaje de películas para sus versiones latinas?
Ahhhh, eso me encantaría, me encantaría poder doblar algún personaje así. Algunas de mis profesoras de La Academia se dedican a eso.
¿Qué has compartido con México de tu cultura ecuatoriana?
¿Qué han aprendido de mí? Yo diría que, el guayaco sobre todo es una persona que es bien confianzuda, y yo siento que soy bien confianzuda y algo que llegar a ser similar, pero es diferente, es que en México la gente es bien amigable. No es lo mismo que confianzudo pero cuando esto se combina crea un buen match.
¿Qué es lo primero que aprendiste a hacer en México?
A comer tacos siempre y a comer picante.
¿Qué aprendiste como adulto independiente?
¡Uy¡, que salir a comer a restaurantes es muy caro y ya aprendí a cocinarme las cosas que me gustan. Entonces ya sé hacer chilaquiles, agua de horchata, agua de jamaica, tacos. Me gusta mucho la comida coreana y ya hace algún tiempo aprendí a cocinar kimchi, kimbap, se hacer algunas cosas bastantes complicadas.
¿Qué descubriste en tu vida adulta, que antes dabas por sentado viviendo en Ecuador, que no es tan sencillo?
Limpiar la casa. Dios mío, yo vivo en un depa chiquitito, pero qué horrible que es limpiar la casa. Lo bueno que mi casa acá tiene el piso oscuro, en México tiene el piso blanco, que se te cae un pelo y parece que pasó un tractor de guerra encima.
Si vamos a recorrer México, ¿Qué hay que ir a visitar?
A mí me gustan mucho los tianguis (mercado). Yo amo la moda, y me gusta mucho este concepto de moda consciente y esto de comprar prendas, transformarlas sobre todo, a mí es algo que me gusta mucho y he encontrado joyitas que he usado en los shows. Me gustan también los museos y también el turismo gastronómico, me gusta mucho comer.
¿Cuál es tu mayor alegría?
Los marcianos
¿Tu mayor miedo?
Sería perder mi voz. (E)
