Una eventual alianza entre Mauricio Rodas (SUMA) y Juan Carlos Solines (CREO), para ir por la Alcaldía de Quito, no incluye, para este último, a Antonio Ricaurte. “Este es un frente de oposición, una oposición constructiva, sin insultos, sin agresión, pero con firmeza y al ser el líder del movimiento Vive afín al Gobierno creemos que no calza en esta unidad”.

Solines esperó ayer por más de media hora al líder de SUMA en una cafetería de la calle Foch, a la que lo había invitado a través de redes sociales para hablar de una candidatura única que enfrente a Augusto Barrera (AP), que va por la reelección.

Rodas no llegó. A esa misma hora visitaba un mercado en La Magdalena, en el sur de la capital, donde degustó mote con chicharrón y conversó con los dirigentes a quienes consultó las necesidades del sector, según escribió en Twitter.

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Tras la espera, Solines abandonó la mesa en la que aguardaba con dos tazas: “Le seguiremos invitando, habría sido cortés de su parte que nos diga que no va a venir, pero en todo caso creemos que más importante es Quito y la unidad, por lo que insistiremos”.

Según las últimas encuestas de dos empresas en Quito, el alcalde tiene una amplia ventaja. En Cedatos consta con el 49,6% de intención de voto, le sigue Rodas con el 23,5% y luego Solines con 3,4%. Perfiles de Opinión le da a Barrera el 46,8%; a Rodas el 8,5% y a Solines el 4%; e incluye a Ricaurte con el 14,7% de aceptación, este declinó su candidatura para apoyar la postulación de Rodas.