No puede revelar muchos detalles sobre la negociación entre la Constructora Odebrecht y el Estado ecuatoriano, pero el director de la empresa para el área andina, Félix Martins, quiere dejar en claro que busca cerrar el capítulo de corrupción y reparar a la sociedad ecuatoriana. Negocia en una mesa con varias instituciones del Estado y no son reuniones fáciles, aunque adelantó que la idea sería culminar el proceso a fines de año. Esta empresa “no va a tener un segundo chance, estamos muy conscientes de eso”, agregó el ejecutivo, cuya oficina principal está en Bogotá.