Tras los resultados de las elecciones anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) que colocan a Daniel Noboa Azín como el presidente de la República electo, las primeras lecturas del por qué de este triunfo electoral se dan por el lado del sector empresarial del que proviene quien siguió los pasos de su padre desde los 18 años y ha creado varias empresas.
Daniel Noboa Azín tiene 35 años, su primera incursión política fue en las elecciones del 2021 y ganó un espacio en la Asamblea Nacional y ahí fue presidente de la Comisión de Desarrollo Económico, que tramitó varios proyectos de ley del ámbito económico, tributario y de inversiones. Es hijo del empresario y cinco veces candidato presidencial Álvaro Noboa Pontón y de la doctora y exdiputada Anabella Azín. Llega a la Presidencia por la alianza Acción Democrática Nacional (ADN).
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La empresaria guayaquileña Francesca Ferrero, por ejemplo, quien ha sido dirigente gremial, destaca el triunfo de Noboa Azín, pero más que resaltar por qué el Ecuador vuelve a apostar por un candidato que es empresario, tiene otra lectura de su triunfo, sin desmerecer que el país buscó una opción nueva y de gente joven: “Sería de preguntarse por qué nuevamente el país le dice ‘no’ al correísmo, ‘no’ a esas propuestas, al pasado, a la corrupción, y el país le apuesta a la gente nueva, le apuesta a un cambio y le apuesta a la gente joven que realmente quisiera accionar. Son 18 meses en los cuales el Ecuador debe unirse para lograr que cualquier proyecto salga adelante”.
Exportadores creen que población quiere que las empresas crezcan y den más empleos
Por su parte, Felipe Rivadeneira, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), analiza el triunfo de Noboa Azín como una señal de que el Ecuador “ya se cansó de esta confrontación entre políticos”, y además que la población busca el ensanchamiento del sector privado para bajar los índices de desempleo.
Lo que le espera al nuevo presidente de Ecuador
“Ya no quieren confrontación; quieren la reconstrucción de ideas, construcción de consensos, construcción de soluciones, y lo que sí está claro y creo que lo que el candidato Noboa representa es una esperanza de que se cree riqueza en el país y se creen empleos desde el lado del sector privado (...). La población lo que busca es justamente el ensanchamiento del sector privado; esa es la esperanza de la gente para que los negocios y emprendimientos que se establezcan tengan seguridad jurídica y las empresas puedan seguir creciendo para que puedan generar empleos”, analiza el dirigente exportador.
Agrega que el tema de seguridad va también atado al triunfo de Noboa Azín: “Que exista un país tranquilo, que haya cómo trabajar y cómo crear riquezas, y creo que eso representa el candidato Noboa”.
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Empresarios dan su voto de confianza, pero estarán atentos a gestión
El empresariado en general le da un “voto de confianza” al nuevo Gobierno, así lo afirma Miguel Ángel González, presidente del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), quien sin embargo aclara que el sector estará siempre alineado con el país y no con los gobiernos.
“Siempre empezamos dando un voto de confianza a un Gobierno elegido democráticamente. Nuestra lealtad es con el país, y tenemos la responsabilidad de tender puentes y ayudar a las autoridades electas. Si vemos que sus acciones van en contra del país, entonces levantaremos nuestra voz”, advierte González.
“Esperamos que el nuevo Gobierno sepa poner al país por encima de los intereses particulares, que trabaje por el bien común; también que esté abierto a trabajar en conjunto con los diferentes sectores de la sociedad civil. Un Gobierno cerrado se desconecta de la ciudadanía”, manifiesta el titular del Comité Empresarial.
Indica que el sector público y el sector privado deben trabajar en conjunto para resolver los problemas que aquejan a la población. Y además, que el Gobierno sea un eje de acuerdos para lograr gobernabilidad. “El país necesita un consenso por la seguridad, la inversión y el empleo. Y para eso es necesario que las fuerzas políticas puedan llegar a acuerdos. Un Estado articulado y una sociedad civil organizada son necesarias para levantar al Ecuador”, expresa González. (I)
