Como “riesgoso” calificaron el expediente de Carlos en una institución financiera de Guayaquil cuando solicitó un crédito. Él tiene 85 años y necesitaba $ 20.000 para invertir en un negocio. Indica sentirse sano y que “no piensa morirse a corto plazo”, por eso le “indigna” que le hayan negado el crédito.